San Pedro Sula, Honduras.
Las siamesas que nacieron el pasado 31 de agosto en el hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula, al norte de Honduras, murieron este miércoles.
Las pequeñas se mantenían hospitalizadas a la espera del apoyo del Gobierno o alguna organización social que hiciera posible un traslado al exterior para poder intervernirlas y que fueran separadas.
Los padres de las menores hicieron llamados de auxilio pero no tuvieron eco y este miércoles las menores cedieron tras un infarto.
El neonatólogo, Samuel Santos, quien fue el médico que las atendió desde su nacimiento dijo que lamentablemente lo que se había dicho desde un principio terminó acabando con la vida de las menores, ya que el corazón de una de ellas no iba a resistir y provocó un infarto que afectó a su otra hermana.
Dijo que en las primeras horas de la mañana las niñas estaban bien y una hora y media después de haber sido alimentadas murieron. El médico lamentó que pese a los trámites que se hicieron no se pudo hacer el traslado de las menores proque se cobraba un millón de dólares por la cirugía en un centro médicos en Estados Unidos.
Jakeline Quiróz, la madre de las bebés, dijo que no se explica como las niñas fallecieron porque todos estos días le habían dicho que su estado era estable.
