San Pedro Sula, Honduras.
Las autoridades de la Secretaría de Salud han iniciado gestiones para el traslado de las siamesas que nacieron hace más de una semana en el hospital Mario Rivas.
A pesar de que se han establecido comunicaciones con representantes diplomáticos de Guatemala, ha fracasado el intento de llevar a las menores a ese país para que sean intervenidas.
No obstante, la posibilidad que se contempla ahora es un grupo de especialistas en Los Ángeles, Estados Unidos, a quienes les harán llegar el cuadro clínico que fue enviado desde esta ciudad para que el caso sea evaluado.
La resonancia magnética, las tomografías y todo el cuadro clínico de las niñas son parte de los documentos enviados digitalmente, con el objetivo de evaluar el caso y realizar el traslado para la operación, confirmaron las autoridades del Mario Rivas.
Intento fallido
Según Merlin Fernández, presidente de la comisión interventora instalada en dicho centro asistencial, envió el pasado martes a Vivian Panting, embajadora de Honduras en Guatemala, un paquete de información sobre el diagnóstico de las recién nacidas.
Las gestiones fueron hechas por la Secretaría de Salud y la Cancillería. Las siamesas nacieron hace una semana y media en el Mario Rivas. No comparten órganos, pero sus corazones están unidos por una aurícula.
La complicación recae en una de las menores, ya que su corazón no se terminó de formar. Samuel Santos, neonatólogo, aclaró que el riesgo de que una de ellas fallezca en la intervención es alto debido a la malformación presentada.
Sin embargo, los padres de las niñas tienen fe en que ellas vivirán. “Queremos que las operen y ambas estén bien.
Le pedimos a Dios que nos permita seguir viéndolas con vida, así como nos dio el regalo de verlas nacer”, dijo Nery Perdomo, padre de las siamesas.
Las menores estuvieron conectadas al oxígeno durante la primera semana de vida y fueron alimentadas con líquidos por vía intravenosa.
Evolución
Su evolución ha sido favorable, pero su estado no deja de ser riesgoso. Se les ha suspendido el oxígeno y los líquidos intravenosos. Sus progenitores ya las cargan, pero aún no les dan el alta.
Esto ocurrirá hasta que se obtengan respuestas de las gestiones emprendidas. A pesar de la evolución, no puede haber ningún descuido. La separación es necesaria, pero necesitan urgentemente pañales, ropa, extractor de leche y otras cosas para el aseo personal.
Las autoridades de la Secretaría de Salud han iniciado gestiones para el traslado de las siamesas que nacieron hace más de una semana en el hospital Mario Rivas.
A pesar de que se han establecido comunicaciones con representantes diplomáticos de Guatemala, ha fracasado el intento de llevar a las menores a ese país para que sean intervenidas.
No obstante, la posibilidad que se contempla ahora es un grupo de especialistas en Los Ángeles, Estados Unidos, a quienes les harán llegar el cuadro clínico que fue enviado desde esta ciudad para que el caso sea evaluado.
La resonancia magnética, las tomografías y todo el cuadro clínico de las niñas son parte de los documentos enviados digitalmente, con el objetivo de evaluar el caso y realizar el traslado para la operación, confirmaron las autoridades del Mario Rivas.
Intento fallido
Según Merlin Fernández, presidente de la comisión interventora instalada en dicho centro asistencial, envió el pasado martes a Vivian Panting, embajadora de Honduras en Guatemala, un paquete de información sobre el diagnóstico de las recién nacidas.
Las gestiones fueron hechas por la Secretaría de Salud y la Cancillería. Las siamesas nacieron hace una semana y media en el Mario Rivas. No comparten órganos, pero sus corazones están unidos por una aurícula.
La complicación recae en una de las menores, ya que su corazón no se terminó de formar. Samuel Santos, neonatólogo, aclaró que el riesgo de que una de ellas fallezca en la intervención es alto debido a la malformación presentada.
Sin embargo, los padres de las niñas tienen fe en que ellas vivirán. “Queremos que las operen y ambas estén bien.
Le pedimos a Dios que nos permita seguir viéndolas con vida, así como nos dio el regalo de verlas nacer”, dijo Nery Perdomo, padre de las siamesas.
Las menores estuvieron conectadas al oxígeno durante la primera semana de vida y fueron alimentadas con líquidos por vía intravenosa.
Evolución
Su evolución ha sido favorable, pero su estado no deja de ser riesgoso. Se les ha suspendido el oxígeno y los líquidos intravenosos. Sus progenitores ya las cargan, pero aún no les dan el alta.
Esto ocurrirá hasta que se obtengan respuestas de las gestiones emprendidas. A pesar de la evolución, no puede haber ningún descuido. La separación es necesaria, pero necesitan urgentemente pañales, ropa, extractor de leche y otras cosas para el aseo personal.
