San Pedro Sula, Honduras.
El subcomisionado retirado José Orlando Leiva Natarén afirmó ayer que son falsas las acusaciones de enriquecimiento ilícito hechas en su contra en informes de la desaparecida Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial (DIECP).
“Ni soy dueño de gasolineras, ni tengo L138 millones, ni poseo rastras. Mi única propiedad es la casa donde vivo y está hipotecada con un banco. Toda la documentación está ahí, a la vista de las autoridades”.
Leiva Natarén relató que “soy abogado y en la Policía casi todos los cargos que tuve fueron administrativos, no operativos. Apenas cuatro semanas fui director del Centro Penal de San Pedro Sula y eso fue en 2012. Yo mismo pedí salir del puesto porque sentí que ahí era un lugar muy peligroso”, declaró.
Añadió que la información sobre su caso fue manejada con negligencia por parte de la DIECP, entidad clausurada este año.
“En mayo del año pasado solicité mi retiro voluntario de la Policía, pero misteriosamente se engavetó. Después, en septiembre, salieron con que me depuraban. Hubo mala intención contra mí”.
Crítica
Agregó que “es mentira lo que la DIECP dijo sobre mí. Manejaron de forma irresponsable mi caso. Sacaron muchas conclusiones y todas erróneas. Les di la documentación que aclaraba todo y la ignoraron. Lo peor es que con mala intención filtraron a los medios de comunicación informes, aún sabiendo que no tienen fundamento. La DIECP nunca funcionó y por eso la cerraron”, expresó.
Leiva Natarén manifestó que “ya entregué al
Tribunal Superior de Cuentas toda la documentación que prueba que las gasolineras no son mías, son de petroleras y ahí se demuestra que yo solo trabajo como comisionista en las
gasolineras, y el Tribunal ya llamó a la petrolera y verificó que no son mías”.
Según aseguró, un comisionista es quien administra la gasolinera y recibe una comisión por el combustible que se vende al mes.
Su casa y su negocio
El subcomisionado retirado explicó que “no es potentado”.
“En cuanto a empresas, lo único que tengo es una empresita familiar llamada Corporación Natarén (Conar) que es de venta de repuestos y aceites para carros. Gracias a esa empresa conocí a la gente de la gasolinera y obtuve el puesto de comisionista”, contó.
También se refirió a una empresa a la que dio apertura en Miami, Florida, Estados Unidos.
“Abrí esa empresa en Miami para importar cosas a mi negocio de repuestos en Honduras, pero después me di cuenta que salía muy caro traer las cosas de esa forma, así que nunca operó la empresa en Miami. Solo la abrí, pero no funcionó”.
Montos
Leiva Natarén afirmó: “Ni tengo relación con otras personas con quienes me han querido relacionar, ni con ningún grupo criminal, ni nada”.
Además, el exoficial explicó que “no hay ninguna investigación contra mí por L138 millones, yo no tengo ni de cerca ese patrimonio y el Tribunal Superior de Cuentas ya lo verificó. Ellos solo revisan en mi caso un monto alrededor de los L9 millones. Tampoco tengo rastras, el TSC solo me pidió documentación por tres carros y ni son nuevos. Uno es de 2003, otro de 2005 y otro de 2008”, dijo.
Lamentó que “la irresponsabilidad de la DIECP al hacer informes sin fundamentos ahora dañan mi imagen. Estoy teniendo problemas con mi negocio y trabajo, pero es cuestión de tiempo para que todo se aclare”, expresó.
El subcomisionado retirado José Orlando Leiva Natarén afirmó ayer que son falsas las acusaciones de enriquecimiento ilícito hechas en su contra en informes de la desaparecida Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial (DIECP).
“Ni soy dueño de gasolineras, ni tengo L138 millones, ni poseo rastras. Mi única propiedad es la casa donde vivo y está hipotecada con un banco. Toda la documentación está ahí, a la vista de las autoridades”.
Leiva Natarén relató que “soy abogado y en la Policía casi todos los cargos que tuve fueron administrativos, no operativos. Apenas cuatro semanas fui director del Centro Penal de San Pedro Sula y eso fue en 2012. Yo mismo pedí salir del puesto porque sentí que ahí era un lugar muy peligroso”, declaró.
Añadió que la información sobre su caso fue manejada con negligencia por parte de la DIECP, entidad clausurada este año.
“En mayo del año pasado solicité mi retiro voluntario de la Policía, pero misteriosamente se engavetó. Después, en septiembre, salieron con que me depuraban. Hubo mala intención contra mí”.
 José Leiva Natarén presentó archivos que muestran la documentación que le ha pedido el Tribunal Superior de Cuentas. También mostró la solicitud de retiro voluntario que envió en mayo de 2016, la cual no fue tramitada, pues en septiembre de ese año lo expulsaron.
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Agregó que “es mentira lo que la DIECP dijo sobre mí. Manejaron de forma irresponsable mi caso. Sacaron muchas conclusiones y todas erróneas. Les di la documentación que aclaraba todo y la ignoraron. Lo peor es que con mala intención filtraron a los medios de comunicación informes, aún sabiendo que no tienen fundamento. La DIECP nunca funcionó y por eso la cerraron”, expresó.
| Otros documentos
El TSC pidió a Natarén documentos de soporte sobre su negocio Conar, una escuela y una empresa de seguridad privada.
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Según aseguró, un comisionista es quien administra la gasolinera y recibe una comisión por el combustible que se vende al mes.
Su casa y su negocio
El subcomisionado retirado explicó que “no es potentado”.
“En cuanto a empresas, lo único que tengo es una empresita familiar llamada Corporación Natarén (Conar) que es de venta de repuestos y aceites para carros. Gracias a esa empresa conocí a la gente de la gasolinera y obtuve el puesto de comisionista”, contó.
| Claves
1. Evidencias que entregó el exoficial
El exoficial dijo que ya dio al TSC las pruebas de que su patrimonio es legal.
2. Sobre la acusación de la DIECP
Según Leiva, la DIECP ignoró que los L138 millones eran de petroleras, no de él
3. Inicios en la Policía Nacional
Leiva Natarén se graduó de la Academia Policial en 1990.
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“Abrí esa empresa en Miami para importar cosas a mi negocio de repuestos en Honduras, pero después me di cuenta que salía muy caro traer las cosas de esa forma, así que nunca operó la empresa en Miami. Solo la abrí, pero no funcionó”.
Montos
Leiva Natarén afirmó: “Ni tengo relación con otras personas con quienes me han querido relacionar, ni con ningún grupo criminal, ni nada”.
Además, el exoficial explicó que “no hay ninguna investigación contra mí por L138 millones, yo no tengo ni de cerca ese patrimonio y el Tribunal Superior de Cuentas ya lo verificó. Ellos solo revisan en mi caso un monto alrededor de los L9 millones. Tampoco tengo rastras, el TSC solo me pidió documentación por tres carros y ni son nuevos. Uno es de 2003, otro de 2005 y otro de 2008”, dijo.
Lamentó que “la irresponsabilidad de la DIECP al hacer informes sin fundamentos ahora dañan mi imagen. Estoy teniendo problemas con mi negocio y trabajo, pero es cuestión de tiempo para que todo se aclare”, expresó.
