Tegucigalpa, Honduras
Luego de ser capturado el domingo por la tarde y ser puesto a las órdenes de la justicia, el exsubcomisionado de policía Jorge Alberto Barralaga fue enviado al Centro Nacional Penitenciario de Támara.
Al exjefe de la Unidad Metropolitana policial 1, ubicada en el barrio Los Dolores, de Tegucigalpa, un juez con jurisdicción nacional le dictó detención judicial y programó para el próximo viernes a las 9:00 am la audiencia inicial.
Esta misma medida la dictó contra Reyna Elizabeth Ayala, esposa del exoficial y exasesora de la Secretaría de Seguridad; también contra Edith Roca, cuñada de Barralaga, y Montse Paola Fraga Duarte, pareja sentimental del extraditado narcotraficante hondureño Wilter Blanco. A las tres mujeres las enviaron a la Penitenciaría Nacional Femenil de Adaptación Social en Támara.
El exoficial y las tres mujeres son acusados por el Ministerio Público de pertenecer a una red criminal dedicada a lavar activos proveniente del narcotráfico. La Fiscalía confirmó ayer que en este caso existen tres órdenes de capturas pendientes por ejecutar, se trataría de familiares del comisionado en condición de retiro.
| Para recordar
El exoficial Jorge Alberto Barralaga estuvo involucrado indirectamente en la muerte del hijo de la rectora Julieta Castellanos y un amigo, al permitir que varios policías se escaparan después del hecho.
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Capturas
La Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic) y la Unidad Fiscal de Apoyo al Proceso de Depuración Policial (UF-Adpol) el domingo efectuaron allanamientos en una residencia de la colonia Las Cascadas de la capital, adonde capturaron al exoficial y su señora Reyna Ayala.
De igual manera, arrestaron a Edith Roca en la ciudad de Tocoa, Colón, y Montse Paola Fraga Duarte, cerca de un centro comercial en La Ceiba.
Tanto Roca como Fraga fueron trasladadas hasta la capital hondureña el domingo por la noche y ayer lunes se les presentó ante la justicia hondureña.
Reacción
El portavoz de la Secretaría de Seguridad, subcomisionado Julián Hernández, en torno a la detención de la exasesora de la Policía Nacional Reyna Ayala, reiteró que “la comisión de depuración hizo un proceso de reestructuración en las unidades jurídicas, evaluando a cada uno de ellos”. Reconoció que la Policía Nacional no tenía ningún proceso investigativo contra la abogada Ayala, a pesar de que el Ministerio Público hoy la acusa de lavado de activos.
“Ella -la esposa de Barralaga- no es un policía activo, es una empleada auxiliar que realizaba funciones administrativas, su labor era asesorar y supervisar los procedimientos administrativos y legales de los policías de la Unidad Metropolitana de Prevención 1, del barrio Los Dolores, nada operativo”, enfatizó Hernández.
