Tegucigalpa, Honduras.
Las tarifas que sean recaudadas en el trasporte público serán manejadas por el Estado a través del Sistema de Recauda Embarcado que crea la nueva Ley de Transporte Terrestre.
Dicho sistema lo define el artículo 79 del reglamento como un conjunto de equipos y sistemas tecnológicos orientados a la recaudación de tarifas aplicadas a los buses urbanos, rapiditos, taxis, entre otros.
Esto indica que el cobro en estos tres tipos de transporte se realizará bajo la modalidad de tarjetas prepago.
Actualmente, los buses urbanos grandes cobran una tarifa de L4; los rapiditos, entre 10 y 11 lempiras, y el taxi colectivo, L13.
Sin embargo, este dinero ahora no será cobrado por el conductor, sino que será debitado de las tarjetas prepago, y los fondos serán administrados por el Estado, según el comisionado del Transporte, Roberto Zacapa.
“Definitivamente es el Estado que lo va manejar. La banca es un recaudador de cada uno de estos pagos, pero quien administra esto es el Estado de Honduras. El servicio del transporte es un servicio público, es del Estado, y simplemente se concesiona”, detalló.
La comisión liquidadora de la Dirección General de Transporte (DGT) ya tiene toda la información de los 682 empleados a los que les van a cancelar sus derechos laborales.
“Estamos avanzando en el proceso de liquidación, pues tenemos toda la información. Estamos pendientes de algunos trámites que quedan en Finanzas y en la Tesorería General para empezar a entregar las notificaciones a cada uno de los empleados”, expresó Felipe Morales, integrante y vocero de la comisión liquidadora.
Las tarifas que sean recaudadas en el trasporte público serán manejadas por el Estado a través del Sistema de Recauda Embarcado que crea la nueva Ley de Transporte Terrestre.
Dicho sistema lo define el artículo 79 del reglamento como un conjunto de equipos y sistemas tecnológicos orientados a la recaudación de tarifas aplicadas a los buses urbanos, rapiditos, taxis, entre otros.
Esto indica que el cobro en estos tres tipos de transporte se realizará bajo la modalidad de tarjetas prepago.
Actualmente, los buses urbanos grandes cobran una tarifa de L4; los rapiditos, entre 10 y 11 lempiras, y el taxi colectivo, L13.
Sin embargo, este dinero ahora no será cobrado por el conductor, sino que será debitado de las tarjetas prepago, y los fondos serán administrados por el Estado, según el comisionado del Transporte, Roberto Zacapa.
“Definitivamente es el Estado que lo va manejar. La banca es un recaudador de cada uno de estos pagos, pero quien administra esto es el Estado de Honduras. El servicio del transporte es un servicio público, es del Estado, y simplemente se concesiona”, detalló.
La comisión liquidadora de la Dirección General de Transporte (DGT) ya tiene toda la información de los 682 empleados a los que les van a cancelar sus derechos laborales.
“Estamos avanzando en el proceso de liquidación, pues tenemos toda la información. Estamos pendientes de algunos trámites que quedan en Finanzas y en la Tesorería General para empezar a entregar las notificaciones a cada uno de los empleados”, expresó Felipe Morales, integrante y vocero de la comisión liquidadora.
