Tegucigalpa, Honduras.
Bessy Romero es una de las madres que deberá presentarse a la audiencia de descargo para definir la cantidad de la multa que deberá pagar y posteriormente seguir el proceso judicial.
Su hijo Cristian Suazo (17) se encuentra hospitalizado en el Hospital Escuela, luego de que un mortero le explotara el domingo en la bolsa de su pantalón.
“Él acababa de salir de la iglesia y un compañero le dio una bomba para que se la tuviera, prendieron un volcán y una pringuita de fuego le cayó en el pantalón”, declaró angustiada la madre del joven.
Ayer, las autoridades de la alcaldía del Distrito Central y del Ministerio Público advirtieron que los padres de los niños que han resultado quemados por manipular pólvora deberán pagar multas económicas y enfrentar requerimientos fiscales.
Las multas van desde 1,000 hasta 5,000 lempiras de acuerdo con el grado de responsabilidad de los padres. La Fiscalía de la Niñez actuará conjuntamente para realizar las investigaciones correspondientes.
El Juzgado de Policía llevó a cabo ayer una inspección en la sala de quemados del Hospital Escuela.
La inspección se autorizó debido a que el pasado domingo ingresaron tres menores de edad con graves quemaduras al centro asistencial, dos de la capital y uno de El Paraíso. “Tenemos que proceder contra los padres de familia. Se les citó para el martes 3 de enero a la audiencia de descargo para aplicar la sanción que corresponde y estos expedientes van a ser remitidos a la Fiscalía de la Niñez”, declaró Miriam Reyes, jueza de policía.
Bessy Romero es una de las madres que deberá presentarse a la audiencia de descargo para definir la cantidad de la multa que deberá pagar y posteriormente seguir el proceso judicial.
Su hijo Cristian Suazo (17) se encuentra hospitalizado en el Hospital Escuela, luego de que un mortero le explotara el domingo en la bolsa de su pantalón.
“Él acababa de salir de la iglesia y un compañero le dio una bomba para que se la tuviera, prendieron un volcán y una pringuita de fuego le cayó en el pantalón”, declaró angustiada la madre del joven.
Ayer, las autoridades de la alcaldía del Distrito Central y del Ministerio Público advirtieron que los padres de los niños que han resultado quemados por manipular pólvora deberán pagar multas económicas y enfrentar requerimientos fiscales.
Las multas van desde 1,000 hasta 5,000 lempiras de acuerdo con el grado de responsabilidad de los padres. La Fiscalía de la Niñez actuará conjuntamente para realizar las investigaciones correspondientes.
El Juzgado de Policía llevó a cabo ayer una inspección en la sala de quemados del Hospital Escuela.
La inspección se autorizó debido a que el pasado domingo ingresaron tres menores de edad con graves quemaduras al centro asistencial, dos de la capital y uno de El Paraíso. “Tenemos que proceder contra los padres de familia. Se les citó para el martes 3 de enero a la audiencia de descargo para aplicar la sanción que corresponde y estos expedientes van a ser remitidos a la Fiscalía de la Niñez”, declaró Miriam Reyes, jueza de policía.
