San Pedro Sula, Honduras.
Varias víctimas hondureñas de trata de personas son obligadas a hacer cosas aberrantes, que van desde explotación sexual y mendicidad forzada hasta proxenetismo, y en el caso de menores, muchos son usados también para pornografía infantil.
Según estadísticas de las autoridades hondureñas, aproximadamente el 56% de las víctimas de trata son mujeres de entre 18 y 49 años.
Mientras que el 21% son niñas de entre 11 y 17 años.
También se detalla que del total, el 16% de las víctimas son niños de entre 11 y 17 años.
Un dato revelador es que ni siquiera los hombres se salvan de la trata de personas, aunque en mucho menor medida, ya que en una investigación realizada por las autoridades hondureñas se descubrió que en el 3% de los casos las víctimas eran varones de entre 18 y 26 años.
Sobre este problema, la fiscal Martha Patricia Gonzales, jefe de la Unidad Contra la Trata, Explotación Sexual - Comercial y Tráfico de Personas del Ministerio Público, manifiestó que “con ayuda de los afectados se puede saber qué buscar para poder llegar a las personas que cometen estos delitos, poder investigarlos y llevarlos a los tribunales”, recalca.
Dinero sucio
La prostitución y la mendicidad forzada son las dos principales fuentes de ingreso para las redes criminales dedicadas a la trata de personas.
Según el último informe presentado por la Comisión Interinstitucional contra la Explotación Sexual Comercial y Trata de Personas (Cicesct), las víctimas de trata de personas y explotación sexual son usadas para proxenetismo, pornografía infantil, mendicidad forzada, servidumbre, entre otras actividades.
En el último informe presentado por la Cicesct se documentaron 154 casos de trata de personas y de explotación sexual.
En los cuadros estadísticos se detalla que 56 víctimas estaban en situación de proxenetismo (dedicadas a la prostitución), 31 personas fueron halladas en situación de mendicidad forzada y 28 fueron explotadas sexualmente.
El informe de Cicesct también indica que se halló a 20 personas que estaban en trabajos forzados o servidumbre en el país.
Mientras que 13 estaban en explotación laboral, trabajo forzado o servidumbre en el extranjero.
Se halló además a dos víctimas usadas para pornografía infantil y otras dos para ser vendidas
También se encontró a cinco víctimas de trata de personas a quienes los tenían para reclutamiento de niños menores de 18 años para actividades ilícitas.
“Estructuras delictivas, particularmente maras y pandillas, han enfocado sus esfuerzo en reclutar adolescentes que se encuentran en situación de vulnerabilidad”, señala la Cicesct.
Destinos
La Comisión Interinstitucional contra la Explotación Sexual Comercial y Trata de Personas informó que en el 2017 detectaron, rescataron, y protegieron a víctimas hondureñas en diferentes países de Amércia, pero también en otros continentes.
Algunos de los países donde se halló a víctimas hondureñas fue en Guatemala, Argentina, México, Francia y Belice.
Según la Cicesct, esto pone de manifiesto que cada año, personas hondureñas son captadas para explotarlas en otros países.
“La migración irregular sigue exponiendo a connacionales en su trayecto por la ruta migratoria especialmente hacia Estados Unidos, al riesgo de ser sometidos a los delitos de explotación sexual comercial y trata de personas”, explican autoridades de la Cicesct.
Varias víctimas hondureñas de trata de personas son obligadas a hacer cosas aberrantes, que van desde explotación sexual y mendicidad forzada hasta proxenetismo, y en el caso de menores, muchos son usados también para pornografía infantil.
Según estadísticas de las autoridades hondureñas, aproximadamente el 56% de las víctimas de trata son mujeres de entre 18 y 49 años.
Mientras que el 21% son niñas de entre 11 y 17 años.
También se detalla que del total, el 16% de las víctimas son niños de entre 11 y 17 años.
Un dato revelador es que ni siquiera los hombres se salvan de la trata de personas, aunque en mucho menor medida, ya que en una investigación realizada por las autoridades hondureñas se descubrió que en el 3% de los casos las víctimas eran varones de entre 18 y 26 años.
Sobre este problema, la fiscal Martha Patricia Gonzales, jefe de la Unidad Contra la Trata, Explotación Sexual - Comercial y Tráfico de Personas del Ministerio Público, manifiestó que “con ayuda de los afectados se puede saber qué buscar para poder llegar a las personas que cometen estos delitos, poder investigarlos y llevarlos a los tribunales”, recalca.
Dinero sucio
La prostitución y la mendicidad forzada son las dos principales fuentes de ingreso para las redes criminales dedicadas a la trata de personas.
Según el último informe presentado por la Comisión Interinstitucional contra la Explotación Sexual Comercial y Trata de Personas (Cicesct), las víctimas de trata de personas y explotación sexual son usadas para proxenetismo, pornografía infantil, mendicidad forzada, servidumbre, entre otras actividades.
En el último informe presentado por la Cicesct se documentaron 154 casos de trata de personas y de explotación sexual.
En los cuadros estadísticos se detalla que 56 víctimas estaban en situación de proxenetismo (dedicadas a la prostitución), 31 personas fueron halladas en situación de mendicidad forzada y 28 fueron explotadas sexualmente.
El informe de Cicesct también indica que se halló a 20 personas que estaban en trabajos forzados o servidumbre en el país.
Mientras que 13 estaban en explotación laboral, trabajo forzado o servidumbre en el extranjero.
Se halló además a dos víctimas usadas para pornografía infantil y otras dos para ser vendidas
También se encontró a cinco víctimas de trata de personas a quienes los tenían para reclutamiento de niños menores de 18 años para actividades ilícitas.
“Estructuras delictivas, particularmente maras y pandillas, han enfocado sus esfuerzo en reclutar adolescentes que se encuentran en situación de vulnerabilidad”, señala la Cicesct.
Destinos
La Comisión Interinstitucional contra la Explotación Sexual Comercial y Trata de Personas informó que en el 2017 detectaron, rescataron, y protegieron a víctimas hondureñas en diferentes países de Amércia, pero también en otros continentes.
Algunos de los países donde se halló a víctimas hondureñas fue en Guatemala, Argentina, México, Francia y Belice.
Según la Cicesct, esto pone de manifiesto que cada año, personas hondureñas son captadas para explotarlas en otros países.
“La migración irregular sigue exponiendo a connacionales en su trayecto por la ruta migratoria especialmente hacia Estados Unidos, al riesgo de ser sometidos a los delitos de explotación sexual comercial y trata de personas”, explican autoridades de la Cicesct.
