Representantes de transportes Congolón recriminaron el involucramiento de esa empresa y de uno de sus empleados en una red internacional para el tráfico de personas por parte del Ministerio Público de Honduras.
En la mañana del miércoles, el organismo de investigación informó sobre la detención en Comayagüela, en el marco de la Operación Mesoamérica, de Wilmer Francisco Cruz Padilla, a quien se señaló como administrador de la empresa involucrado en facilitar la venta de tiquetes a personas indocumentadas.
'Es el administrador de la empresa de transporte Congolón y es parte de las personas que estaban dentro del requerimiento fiscal contra nueve personas, de las cuales van siete capturadas', confirmó Yuri Mora, portavoz del Ministerio Público.
Margarita Ramos, socia de Congolón, explicó que Cruz Padilla 'no es el administrador de la empresa y simplemente se encarga a la venta de boletos en Tegucigalpa', y destacó que 'hasta el momento no hemos recibido ninguna orden de captura en su contra'.
Agregó que 'si bien es cierto que nosotros hacemos viajes de Tegucigalpa hacia Aguacaliente todos los días a las 9:00 pm, no es nuestra potestad y no tenemos capacidad para impedirle a las personas viajar. Si las personas ya están en Tegucigalpa es porque ingresaron legalmente al país y pueden viajar'.
La ejecutiva destacó que si bien la empresa exije documentos de viaje como pasaporte o cédula, deben ser las autoridades las que tienen que ejercer los controles como 'en muchas ocasiones lo hacen, e incluso mediantes las multas por permitir a las empresas viajar a personas sin documentación'.
Destacó que 'por ser una empresa que viaja a Aguacaliente no quiere decir que seamos coyotes, solo cumplimos con transportar a las personas a su destino. Sentimos que esto va dirigido a la empresa y nos perjudica'.
Los transportistas señalaron que en varias ocasiones se ha denunciado a empresas 'express' que están autorizadas por la Dirección de Transporte para llevar personas desde Choluteca hasta la zona occidental del país, cuyas unidades 'incluso hacen la ruta Tegucigalpa-Siguatepeque-Gracias, la cual es más corta'.
Diferentes unidades policiales de Honduras, Panamá, El Salvador, Costa Rica y Guatemala capturaron simultáneamente a 31 cabecillas y miembros de una red internacional de tráfico de personas que cobraban entre 7,000 y 25,000 dólares a cada emigrante por llevarlo a Estados Unidos.
La Operación Mesoamérica contó con el apoyo de países como Estados Unidos, Brasil, Colombia y México.
Autoridades de los países que operaron para detener a los líderes y contactos de la red criminal calificaron como el trabajo más importante que se ha realizado en América contra la trata de personas.
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