Puerto Cortés, Honduras.
José Darío Gámez, gerente de la Empresa Nacional Portuaria (ENP), afirmó que no existió ningún tipo de irregularidades en las contrataciones de proyectos que adjudicó la estatal ni en la ejecución de los mismos.
“Se ha llevado a cabo todo el proceso de transición de las dos terminales que operan en Puerto Cortés, como son la terminal de contenedores y carga general, y la terminal de graneles, el mejoramiento de la parte de seguridad de conformidad al código de Protección de Buques y de las Instalaciones Portuarias (PBIP), y se han desarrollado escenarios para que la empresa se inserte en el nuevo esquema de funcionamiento en Puerto Cortés”, declaró Gámez.
El gerente de la ENP aseguró que no ha habido despilfarro en las obras de la Portuaria, pues tales aseveraciones se derivan del informe preliminar de proyectos menores del año 2013 presentado por la unidad de auditoría interna de la ENP, en sesión ordinaria del consejo directivo de la empresa, pero dijo que se dio únicamente por recibido y se trasladó para que la unidad de auditoría revisara junto con la administración el documento.
“Las aseveraciones que se hacían no contenían ningún fundamento técnico ni estaban apoyadas en dictamen técnico de personas con el calificativo para realizarlas. Las observaciones y aparentes hallazgos de auditoría interna en ese informe preliminar fueron debidamente aclarados por la división técnica, que es la dependencia encargada de darle cumplimiento a los contratos de obra en la empresa”, indicó Gámez, quien agregó que el informe definitivo ya fue presentado en la sesión ordinaria número 837 de fecha 7 de mayo de 2014, en donde el consejo directivo resolvió tener por recibido dicho informe definitivo y que se cumplan las recomendaciones u observaciones realizadas por la auditoría interna.
José Darío Gámez, gerente de la Empresa Nacional Portuaria (ENP), afirmó que no existió ningún tipo de irregularidades en las contrataciones de proyectos que adjudicó la estatal ni en la ejecución de los mismos.
“Se ha llevado a cabo todo el proceso de transición de las dos terminales que operan en Puerto Cortés, como son la terminal de contenedores y carga general, y la terminal de graneles, el mejoramiento de la parte de seguridad de conformidad al código de Protección de Buques y de las Instalaciones Portuarias (PBIP), y se han desarrollado escenarios para que la empresa se inserte en el nuevo esquema de funcionamiento en Puerto Cortés”, declaró Gámez.
El gerente de la ENP aseguró que no ha habido despilfarro en las obras de la Portuaria, pues tales aseveraciones se derivan del informe preliminar de proyectos menores del año 2013 presentado por la unidad de auditoría interna de la ENP, en sesión ordinaria del consejo directivo de la empresa, pero dijo que se dio únicamente por recibido y se trasladó para que la unidad de auditoría revisara junto con la administración el documento.
“Las aseveraciones que se hacían no contenían ningún fundamento técnico ni estaban apoyadas en dictamen técnico de personas con el calificativo para realizarlas. Las observaciones y aparentes hallazgos de auditoría interna en ese informe preliminar fueron debidamente aclarados por la división técnica, que es la dependencia encargada de darle cumplimiento a los contratos de obra en la empresa”, indicó Gámez, quien agregó que el informe definitivo ya fue presentado en la sesión ordinaria número 837 de fecha 7 de mayo de 2014, en donde el consejo directivo resolvió tener por recibido dicho informe definitivo y que se cumplan las recomendaciones u observaciones realizadas por la auditoría interna.
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El gerente de la Portuaria manifestó que los proyectos menores ejecutados por la administración en el 2013, fueron efectuados dentro del ámbito de sus atribuciones y respetando los preceptos establecidos en la Ley de Contratación del Estado, su reglamento y demás leyes vigentes.
“Las normas de auditoría interna no permiten que una auditoría efectuada pueda divulgarse mientras se está en esta etapa, situación que ha sido incumplida”.
Gámez explicó que con la aparente sobrevaloración y la no justificación de la realización de algunos proyectos menores en la ENP, enunciada por auditoría interna, muchos de estos proyectos son producto de la necesidad de adecuar las instalaciones al proceso de transición de las dos terminales que se ejecutan en el puerto, las no conformidades producto de la evacuación que les realiza la Comisión Nacional de Protección Portuaria (CNPP), ya que es un puerto certificado con calificación de megapuerto y hay que mantener el estándar de cumplimiento de la Organización Marítima Internacional (OMI). El gerente de la ENP indicó que por ello se tuvieron que hacer mejoras a muros perimetrales, circuito cerrado de televisión (CC TV Digital), arcos detectores de metal, revisión y enmiendas al Plan de Protección de la Instalación Portuaria (PPIP), mejoramiento del sistema de iluminación, comunicación o enlaces con los otros puertos y limpieza en todo el recinto portuario.
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“De igual forma en dichos proyectos menores existen obras que fueron construidas en carácter de donación a ciertas comunidades, las mismas que realiza la empresa como una proyección social en beneficio de sectores de la población que solicitan apoyo”, dijo Gámez.
El gerente de la Portuaria expresó que de cada proyecto menor ejecutado existe su ficha de costo, la que está en poder de la división técnica de la empresa, tomando como base la revista Estadísticas Oficiales de la Industria de la Construcción, edición tercera 2013, la cual contiene precio menor, mediano y mayor, pero no refleja otro tipo de actividades que hay que realizar y que es necesario incorporar a la ficha de costo, y en las mismas se ha logrado, según él, reducir sustancialmente los valores que se venían cobrando, lo cual aseguró ha reflejado una importante cantidad de dinero ahorrada en beneficio de los intereses de la empresa.
Gámez aseveró que un ejemplo de cómo se han venido ejecutando proyectos es lo ocurrido con el proyecto de construcción de cuatro boyas y rehabilitación de dos boyas en San Lorenzo con número de inventario (09-007897-3 y 09-0079195), el cual afirmó según auditoría interna estuvo mal manejado, desconociendo esa unidad sus mismas observaciones, que el contratista debido al incumplimiento en el tiempo de ejecución del contrato, se le rescindió el mismo y se ejecutó la garantía de cumplimiento presentada por el contratista y en poder de la ENP por el valor de L134,856.96, mediante la presentación del certificado de incumplimiento a la institución bancaria responsable de la emisión del cheque certificado correspondiente que avala el cumplimiento del contratista.
“Sobre el cuestionamiento de que algunos proyectos se podrían hacer con mano de obra de la ENP, demostramos a auditoría interna que hacerlo con personal de la ENP habría sido más caro”, dijo Gámez.
