San Pedro Sula, Honduras.
A raíz de las masacres ocurridas en los últimos dos meses el presidente Juan Orlado Hernández reveló ayer que la estrategia de seguridad ha sido replanteada y la conclusión es que las reformas penales deben ser aprobadas y no politizadas.
Un informe presentado al presidente Juan Orlando Hernández ayer en San Pedro Sula, donde se dieron a conocer los avances alcanzados por la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina) en el período 2016, y los nuevos proyectos y operativos de 2017, concluye que las muertes múltiples son originadas por control de territorio, narcomenudeo y extorsión.
El mandatario hondureño, acompañado por miembros del Consejo de Defensa y Seguridad, dijo que se han implementado acciones que han resultado y otras que no se dan a conocer por razones de seguridad.
“Una de las conclusiones es reiterar al Congreso Nacional que las reformas (al Código Penal) que están en sus manos nacen del debate interno de los operadores de Fusina que es lo que ellos necesitan para que esa contundencia del Estado tenga ese parámentro jurídico que hoy no lo tenemos. En el pasado la conducta ciudadana tenía ciertas características y hoy no tiene nada que ver el mundo criminal con lo que se miraba hace 50 años”.
Indicó que se tiene que revisar lo que está pasando en Honduras cuando se irrumpe con balas un velatorio sin importar quiénes están ahí, es una conducta antisocial extrema que requiere una contundencia del Estado, para eso es que solicitamos que las reformas penales sean aprobadas.
Protestas
Reiteró que todo el que quiera protestar puede hacerlo y de manera contundente, pero que no confunda ese derecho con la capacidad de irrumpir en un restaurante, rociar combustible y prenderle fuego sin importar si hay seres humanos o dañar la propiedad privada.
Las protestas se tienen que hacer dentro de los límites. “Líderes de la oposición a propósito han querido politizar el tema.
Aquí entre gitanos no se leen las manos, en ese sentido ellos sabrán cuál es su cálculo, pero me parece que lo hicieron mal. Aquí en este tema tan sensible, tan importante, no se tiene por qué estar jugando a politiquerías”. El mandatario dijo que si no se dan en este Congreso se van a dar en el próximo Congreso”.
A raíz de las masacres ocurridas en los últimos dos meses el presidente Juan Orlado Hernández reveló ayer que la estrategia de seguridad ha sido replanteada y la conclusión es que las reformas penales deben ser aprobadas y no politizadas.
Un informe presentado al presidente Juan Orlando Hernández ayer en San Pedro Sula, donde se dieron a conocer los avances alcanzados por la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina) en el período 2016, y los nuevos proyectos y operativos de 2017, concluye que las muertes múltiples son originadas por control de territorio, narcomenudeo y extorsión.
El mandatario hondureño, acompañado por miembros del Consejo de Defensa y Seguridad, dijo que se han implementado acciones que han resultado y otras que no se dan a conocer por razones de seguridad.
“Una de las conclusiones es reiterar al Congreso Nacional que las reformas (al Código Penal) que están en sus manos nacen del debate interno de los operadores de Fusina que es lo que ellos necesitan para que esa contundencia del Estado tenga ese parámentro jurídico que hoy no lo tenemos. En el pasado la conducta ciudadana tenía ciertas características y hoy no tiene nada que ver el mundo criminal con lo que se miraba hace 50 años”.
Indicó que se tiene que revisar lo que está pasando en Honduras cuando se irrumpe con balas un velatorio sin importar quiénes están ahí, es una conducta antisocial extrema que requiere una contundencia del Estado, para eso es que solicitamos que las reformas penales sean aprobadas.
Protestas
Reiteró que todo el que quiera protestar puede hacerlo y de manera contundente, pero que no confunda ese derecho con la capacidad de irrumpir en un restaurante, rociar combustible y prenderle fuego sin importar si hay seres humanos o dañar la propiedad privada.
Las protestas se tienen que hacer dentro de los límites. “Líderes de la oposición a propósito han querido politizar el tema.
Aquí entre gitanos no se leen las manos, en ese sentido ellos sabrán cuál es su cálculo, pero me parece que lo hicieron mal. Aquí en este tema tan sensible, tan importante, no se tiene por qué estar jugando a politiquerías”. El mandatario dijo que si no se dan en este Congreso se van a dar en el próximo Congreso”.
