27/04/2024
03:28 PM

Tortuosos trámites orillan a mipymes a la informalidad

El registro sanitario y licencia ambiental son las gestiones más engorrosas, ya que pueden llegar a demorar entre uno y dos años, así lo aseguran los representantes del sector privado hondureño.

    San Pedro Sula, Honduras.

    Muchas micros, pequeñas y medianas empresas ( mipymes) optan por trabajar desde la clandestinidad, luego de intentar someterse, infructuosamente, a largos y costosos procesos para obtener los permisos de operación, licencia sanitaria, ambientales, entre otros trámites, indispensables para operar legalmente.

    “Muchas pequeñas empresas al no poder realizar los trámites lo que hacen es que se quedan en la informalidad, lo cual es dañino para la economía del país. Se necesita mayor eficiencia en los trámites”, dijo Daniel Aguilar, presidente de la Asociación Nacional de Industriales ( Andi).

    Demanda
    Un 66% de las mipymes están en la actividad comercial, incluyendo hoteles y restaurantes.
    Las repercusiones para el Estado son de más de 81 millones de lempiras en impuestos. Asimismo, este sector ha adquirido una dimensión especial, puesto que aporta el 25% del producto interno bruto.

    En el país hay entre 500 mil y 700 mil mipymes, las que generan el 82% de los puestos de trabajo que hay en el mercado laboral. De esta cifra, el 80% son microempresas familiares y la mayoría opera desde la informalidad.

    “Es necesario facilitar los procesos de apertura para dinamizar la economía”, apuntó German Pérez, representante de la Andi.



    En desventaja

    Pedro Barquero, director ejecutivo de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC), dijo que la apertura y la expansión de este segmento empresarial se ve limitada debido a que los requisitos y pasos para iniciar una pequeña empresa son los mismos que los de las grandes compañías. “Esa no es la forma ideal de hacer las cosas. Se debe hacer un conjunto de reglas, diferentes, que faciliten la entrada en operación de las mipymes”, manifestó Barquero.

    Realizar los procesos de constitución, trámites de permiso de operación, registro tributario, facturación, entre otros, puede demorar como mínimo hasta cuatro meses (120 días) o más, detalló.

    Sin embargo, si un negocio (vinculado a productos alimenticios) requiere obtener un registro sanitario o licencia ambiental para funcionar le puede llevar de uno a dos años. “Tenemos casos de mipymes que tienen contratos para abastecer el mercado centroamericano, pero que no han podido vender porque no tienen los registros sanitarios. Es una situación muy grave”, apuntó.

    Puso como ejemplo el caso de una mipyme dedicada a elaborar productos de limpieza que recibió pedidos grandes de empresas de Guatemala y El Salvador, pero que por no tener el registro no ha podido hacer el negocio. “Ellos llevan más de un año esperando que les den el registro sanitario, por eso no han podido ampliar sus operaciones y crear empleo. Prácticamente perdieron el mercado; eso mismo pasa con otras mipymes que obtuvieron contratos con supermercados para abastecerlos con sus productos, pero que por la demora del trámite perdieron la oportunidad”.

    Agregó que “cuando se trabajó el nuevo Código Tributario, el sector privado propuso que se pusieran reglas diferentes para las mipymes, y se estableció la figura del monotributo. El Ministerio de Finanzas tiene este año para definir cómo funcionará. Obviamente, el sector privado también participará en el proceso”.

    También se está pidiendo que se incluya el proceso de Registro Tributario Nacional Numérico (RTN) y facturación en la plataforma miempresaenlinea.org, que actualmente permite hacer el proceso de escrituras sin necesidad de pagar un abogado y en cuestión de horas.

    Competitividad

    Luis Larach, presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), coincide con Barquero en que la solicitud de los registros sanitarios sigue siendo el talón de Aquiles de muchas empresas. “Hay una acumulación de estos trámites que datan desde hace cuatro años. Es una cosa desastrosa como se ha estado trabajando. Lo que queremos es que esta situación se resuelva, eso nos daría competitividad. Debemos recordar que ahora la competencia no es solo a nivel interno, sino mundial”, apuntó.

    Por otra parte, dijo que se debe reconocer que el Gobierno, con el apoyo del sector privado, ha logrado avances significativos en simplificación; sin embargo, dijo que “todavía hay espacio para mejorar. Si bien es cierto que hay esquemas electrónicos que se están utilizando y que han simplificado algunos pasos, las demoras todavía existen. Se tiene que continuar trabajando para mejorar”, refirió.

    Jorge Faraj, presidente de la CCIC, dijo que otro problema que afecta fuertemente a este sector es la dificultad para acceder a financiamiento, ausencia de incentivos para formalizarse y la falta de espacios para exponer y vender sus productos. “Se necesita, como país, desarrollar productos financieros a la medida de los mypimes”.