Tegucigalpa, Honduras.
La Secretaría de Relaciones Exteriores reportó que solo cinco de cada 100 migrantes hondureños deportados han logrado un empleo en 2018 por medio de la Unidad de Atención al Migrante (Umar) de Cancillería, creada en febrero de 2017.
Cifras gubernamentales establecen que de enero a julio de 2018, un total de 37,778 personas fueron retornadas de Estados Unidos y México por haber ingresado de forma ilegal, de las que apenas 2,000 consiguieron emplearse.
La Umar funciona en 18 municipios, incluyendo Tegucigalpa, Francisco Morazán, y San Pedro Sula, Cortés, para dar capacitación y capital semilla a los migrantes a fin de que creen un emprendimiento.
La Secretaría de Relaciones Exteriores reportó que solo cinco de cada 100 migrantes hondureños deportados han logrado un empleo en 2018 por medio de la Unidad de Atención al Migrante (Umar) de Cancillería, creada en febrero de 2017.
Cifras gubernamentales establecen que de enero a julio de 2018, un total de 37,778 personas fueron retornadas de Estados Unidos y México por haber ingresado de forma ilegal, de las que apenas 2,000 consiguieron emplearse.
La Umar funciona en 18 municipios, incluyendo Tegucigalpa, Francisco Morazán, y San Pedro Sula, Cortés, para dar capacitación y capital semilla a los migrantes a fin de que creen un emprendimiento.
Ofrecen opciones
La titular de la Dirección de Protección al Migrante, Lisa Medrano, indicó en conferencia de prensa que cuando un migrante es deportado se le ofrece la cooperación de la Umar; pero la mayoría la rechaza. “En los diferentes centros de atención al migrante, los hondureños llegan cansados, definitivamente. Al inicio, cuando comenzamos este proceso de reinserción se les ofrecían los diferentes programas en el centro, pero ahí nadie los aprovechaba”, indicó Medrano.
La funcionaria expresó que muchos de los compatriotas retornados llegaban cansados de su viaje de regreso y eso pudo generar que no aceptaran la asistencia de la Umar. En la Cancillería dijeron desconocer si los aproximadamente 35 mil hondureños que no fueron beneficiados con la ayuda de la Umar han obtenido algún empleo.
De enero a junio de 2017, la Cancillería reportó 27 mil compatriotas retornados y en el mismo lapso de 2018 se da cuenta de 37 mil, es decir, un incremento de casi 10 mil.
Cada día, 300 hondureños migran, según Movilidad Humana de Honduras.
Estudios de diversas organizaciones evidencian que la inseguridad y la falta de empleo son las principales razones por las cuales los hondureños deciden migrar.
El presidente de la Asociación de Municipios de Honduras (Amhon), Carlos Cano, manifestó que en los próximos días regalarán 50 casas a familiares de migrantes retornados en zonas que son más expulsoras. “Haremos una alianza con la primera dama para darles viviendas a esta gente, crearles microempresas para que no vuelvan a tener la idea de irse nuevamente”, indicó Cano.
Estados Unidos ha aplicado duras políticas antiinmigratorias, pero esto no ha detenido el éxodo a ese país, el objetivo de la mayoría de los desplazados.
