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Los Rosenthal están recluidos en el ‘Guantánamo’ de Nueva York

  • 05 noviembre 2015 /

San Pedro Sula, Honduras.

Ubicado a pocos kilómetros del corazón de Manhattan, el Centro Correccional Metropolitano (MCC), que ha albergado a presos de alta peligrosidad, se ha convertido en el hogar ‘provisional’ de los primos Yani y Yankel Rosenthal, ambos acusados por EUA de lavado de dinero.

La controversial prisión ha sido comparada por medios estadounidenses como el ‘Guantánamo’de Nueva York, puesto que allí han sido recluidos varios terroristas, mafiosos y traficantes de drogas.

El reo más mediático que ha pasado por esa cárcel fue Bernard Madoff, el famoso Lobo de Wall Street, sentenciado a 150 años de prisión por un fraude de 50,000 millones de dólares.

En dicha prisión también estuvieron recluidos los terroristas Ramzi Yousef y Sheik Omar Abdel-Rahman, quienes perpetraron un fallido atentado en el World Trade Center de Nueva York en 1993 con el objetivo de devastar los cimientos de la torre norte para derrumbarla sobre la torre sur. Ocho años más tarde, ambas torres fueron derribadas por Al Qaeda.

En el edificio de 12 pisos, ubicado en el distrito financiero de Manhattan, también hay unidades de confinamiento, especialmente diseñadas para los criminales de alta peligrosidad, quienes han provocado muchas protestas por las supuestas violaciones a los derechos humanos que ahí se perpetran.

Yankel y Yani se encuentran encerrados en el noveno piso del edificio de 12 plantas.

Foto: La Prensa

Los reclusos del MCC visten uniforme caqui y pueden participar en diversos talleres que ofrece la prisión.
Un día en la cárcel

La rutina de los reclusos en el MCC comienza a las seis de la mañana, cuando suena el timbre para que se levanten. El desayuno lo sirven 30 minutos más tarde, según recopila el diario New York Post.

Luego, los presos pueden salir a las áreas abiertas de cada unidad para participar en los diversos programas de actividades que ofrece la prisión.

Las opciones de entretenimiento son escasas. Los únicos televisores están en zonas comunes, adonde se debe compartir la sala con otros detenidos.

Los presos también pueden matar el tiempo leyendo en la biblioteca de la prisión o jugando ping-pong - sin duda alguna sustitutos tristes para las actividades recreativas a las que estaban acostumbrados los acaudalados miembros de una de las familias más poderosas de Honduras-.

El almuerzo lo sirven a las 11:30 am y la cena a las 5:00 pm. Las luces se apagan a las 11:00 pm.

Los primos Rosenthal podrían compartir habitación debido a la ‘accesibilidad’ de los funcionarios de esa cárcel. Cada dos días, a los reclusos se les permite recibir el sol y disfrutar de actividades al aire libre en la terraza vallada del edificio de la prisión.