Tegucigalpa, Honduras.
La canciller de Honduras, Mireya Agüero, afirmó que el Gobierno de Honduras aspira a que el presidente Barack Obama regularice el estatus de unos 65 mil compatriotas amparados al Estatus de Protección Temporal (TPS).
A criterio de la jefa de la diplomacia hondureña, los connacionales han hecho una “contribución notable” a la sociedad norteamericana desde el punto de vista laboral, cultural y económico, pues incluso honran el pago de impuestos. El pasado 29 de septiembre, Honduras solicitó formalmente en Washington la duodécima ampliación del TPS en virtud de que la última prórroga de 18 meses vence el 5 de enero de 2015.
La secretaria de Relaciones Exteriores dijo que hay dos escenarios. El primero es que el presidente Obama finalmente gire una orden ejecutiva para legalizar a los catrachos amparados al TPS, y la otra que se amplíe nuevamente por 18 meses. “Ya hay una contribución no solamente monetaria, sino también sociocultural, así que por una parte esperamos que esa orden ejecutiva efectivamente apoye a que haya un estatus ya no temporal, sino más bien algo más permanente para algunos de nuestros migrantes”.
La funcionaria indicó que no hay una fecha específica sobre la decisión del Gobierno norteamericano respecto a los compatriotas amparados al TPS.
El Gobierno estadounidense aprobó el TPS a ciudadanos hondureños por primera vez en 1999 después del desastre que ocasionó el huracán Mitch en 1998. Diversos sectores afirman que de aprobarse la reforma migratoria que impulsa el Gobierno de Estados Unidos, los beneficiarios del TPS serían los primeros en obtener la residencia y posterior ciudadanía norteamericana.
Oirán quejas
El presidente Juan Orlando Hernández giró instrucciones en las últimas horas al secretario coordinador general de Gobierno, Jorge Ramón Hernández, para que estructure una plataforma que permita escuchar las quejas e inquietudes de catrachos en el extranjero. Hernández pidió la conformación de un centro de llamadas que permita atender a los hondureños que se han visto obligados a salir del país. Con este centro se podrán procesar y denunciar solicitudes de documentos o ayuda que requiere la persona desde el extranjero, explicó el gobernante.
“Es importante tener un solo número al que podamos atender a la gente y recibir llamadas; pero además necesitamos un proceso independiente de monitoreo de atención a la gente”, advirtió.
La canciller de Honduras, Mireya Agüero, afirmó que el Gobierno de Honduras aspira a que el presidente Barack Obama regularice el estatus de unos 65 mil compatriotas amparados al Estatus de Protección Temporal (TPS).
A criterio de la jefa de la diplomacia hondureña, los connacionales han hecho una “contribución notable” a la sociedad norteamericana desde el punto de vista laboral, cultural y económico, pues incluso honran el pago de impuestos. El pasado 29 de septiembre, Honduras solicitó formalmente en Washington la duodécima ampliación del TPS en virtud de que la última prórroga de 18 meses vence el 5 de enero de 2015.
La secretaria de Relaciones Exteriores dijo que hay dos escenarios. El primero es que el presidente Obama finalmente gire una orden ejecutiva para legalizar a los catrachos amparados al TPS, y la otra que se amplíe nuevamente por 18 meses. “Ya hay una contribución no solamente monetaria, sino también sociocultural, así que por una parte esperamos que esa orden ejecutiva efectivamente apoye a que haya un estatus ya no temporal, sino más bien algo más permanente para algunos de nuestros migrantes”.
La funcionaria indicó que no hay una fecha específica sobre la decisión del Gobierno norteamericano respecto a los compatriotas amparados al TPS.
El Gobierno estadounidense aprobó el TPS a ciudadanos hondureños por primera vez en 1999 después del desastre que ocasionó el huracán Mitch en 1998. Diversos sectores afirman que de aprobarse la reforma migratoria que impulsa el Gobierno de Estados Unidos, los beneficiarios del TPS serían los primeros en obtener la residencia y posterior ciudadanía norteamericana.
Oirán quejas
El presidente Juan Orlando Hernández giró instrucciones en las últimas horas al secretario coordinador general de Gobierno, Jorge Ramón Hernández, para que estructure una plataforma que permita escuchar las quejas e inquietudes de catrachos en el extranjero. Hernández pidió la conformación de un centro de llamadas que permita atender a los hondureños que se han visto obligados a salir del país. Con este centro se podrán procesar y denunciar solicitudes de documentos o ayuda que requiere la persona desde el extranjero, explicó el gobernante.
“Es importante tener un solo número al que podamos atender a la gente y recibir llamadas; pero además necesitamos un proceso independiente de monitoreo de atención a la gente”, advirtió.
