Un nuevo tramo de tres kilómetros de los únicos 8.5 km de línea del tren que hay en Honduras será reparado por la Secretaría de Turismo, y así mejorar el acceso al Refugio de Vida Silvestre Cuero y Salado que solo a través de este medio se puede llegar, y está el municipio de El Porvenir, en el caribeño departamento de Atlántida.
Este ramal del ferrocarril que empieza desde la comunidad de La Unión, jurisdicción de este municipio caribeño, es el único que se conserva en el país, y hoy recuerda el pasado glorioso de las locomotoras en el litoral atlántico.
Solo a través de esta ruta de rieles se puede acceder a la laguna de Cuero y Salado, un destino natural protegido, que es el hábitat del manatí y otras especies endémicas.
Estas son los puntos que rehabilitarán del tren
El Gobierno a través de la Secretaría de Turismo invirtió 2.8 millones de lempiras en la rehabilitación de un kilómetro de esta vía, para el tren turístico. Y en las próximas semanas dará comienzo una segunda etapa, con la reparación de un tramo de 3 km.
“Hemos firmado un convenio para darle seguimiento a este proceso, y ya está adjudicado tres kilómetros más para Cuero y Salado”, anunció Marcio Rivera, director ejecutivo de la Red de Comunidades Turísticas de Honduras (Recoturh).
Los trabajos estarán iniciando en unas semanas, “ya se empezó hacer los clavos en México, porque aquí no hay empresas que los puedan hacer. También alistar los durmientes , porque lleva un periodo de secado importante”, adelantó Rivera.
Además de la rehabilitación de esta línea del tren “hemos aprovechado la oportunidad del Ministerio de Turismo para poder visualizar que esto sea un Patrimonio Nacional, porque es la única opción en el país, donde podemos andar sobre rieles”, indicó.
El momento de “las burras”
Desde que se empezaron hacer estas intervenciones, el tren turístico está paralizado, pues hay partes dañadas donde es riesgo transitar.
“De momento solo le estamos dando mantenimiento a las unidades mientras se repara la línea férrea, solo se calientan para cuando llegue el día estén listas”, expresó Norlin Castellón, motorista del tren turístico.
Los turistas que llegan a visitar la zona, lo hacen a través de “las burras”-una plataforma impulsada por la fuerza humana sobre los rieles-.
“Parte de la experiencia de visitar Cuero y Salado empieza desde que se aborda el trencito o lo que es la burra, es una parte que conecta al turista”, explicó Walkirian Méndez, técnico en turismo de la Recoturh.
A través de las burras, la aventura se hace más interesante. “Es un medio que está activo y es operado por la gente de la comunidad”, mencionó Méndez.
El inicio de estos trabajos depende de un estudio ambiental, “ya que estamos dentro de los límites de una de las reservas que está declarada, como es el Refugio de Vida Silvestre Cuero y Salado”, recordó.
La línea del tren no solo lleva a explorar este destino, también es el único medio del que dependen los habitantes que conviven con esta área protegida.
“Esta buena la opción, pues es una área turística y dependemos del tren”, opinó Saturnino Martínez, presidente del patronato de la comunidad de Salado Barra.
Por los momento son “las burras” las que están llevando productos y pasajeros a esta zona protegida, otros habitantes lo hacen a través de motocicletas por toda la línea.
