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¿Ser o no feliz?, experto aconseja como los hondureños pueden hallar la felicidad

  • 20 marzo 2019 /

La felicidad no es producto de hacer una cosa, sino de un cambio en el estilo de vida, y no siempre se lo consigue por arte de magia. Hoy se celebra el Día internacional, usted decide ser o no feliz.

San Pedro Sula, Honduras.

'La felicidad no se dota con los bienes superfluos, sino más bien al disfrutar de esas pequeñas cosas como cuando un hijo le llega con una buena nota o una madre pobre que sale a ganarse la vida y al regresar a casa y se reencuentra con sus hijos o nietos, ver una buena película u otros placeres que cada uno disfruta subjetivamente', comenta el sociólogo Julio Navarro.

Según el experto la valoración de la vida se obtiene en el proceso de socialización de la familia donde a usted le enseñan a quererse, a amarse, ha valorar lo que tiene. 'La felicidad no se logra con tener bienes que solo lo llenan afuera, pero no por adentro'.

Si bien los hondureños no figuran en el índice de los países más felices del mundo de este año 2019, en comparación al año pasado se han escalado trece puesto más acortando la brecha de la infelicidad.

Navarro dice que hay un elemento importante para medir la felicidad y es saber cuál es el límite, el techo de las aspiraciones de acuerdo a las condiciones reales en que se viven.

'Cuando usted se plantea un techo más allá de lo que es posible hacer viene la infelicidad, la frustración y entonces en eso parece que los hondureños somos inteligentes, que construimos la felicidad de acuerdo a las posibilidades de viviencia que la vida nos da'.

Pero, ¿cómo lograr la felicidad? Algunos usuarios como Teyo Jiménez opinan. 'La felicidad es de uno, no del país, él que quiere ser feliz donde sea es feliz, no importa dónde viva'.

Mientras Óscar Turcios comenta: 'Muchas personas creen que tener dinero y lujos es la felicidad y sentirse seguro por eso. Si no tenemos en nuestro corazón y seguimos a Cristo entonces no hay verdadera felicidad'.

Tome en cuenta estos consejos

1. Perdone sus fracasos. Es más: ¡celébrelos! “Al igual que es inútil quejarse del efecto de la gravedad sobre la Tierra, es imposible tratar de vivir sin emociones negativas, ya que forman parte de la vida, y son tan naturales como la alegría, la felicidad y el bienestar. Aceptando las emociones negativas, conseguiremos abrirnos a disfrutar de la positividad y la alegría”.

2. No dé lo bueno por hecho: agradézcalo. Cosas grandes y pequeñas. 'Esa manía que tenemos de pensar que las cosas vienen dadas y siempre estarán ahí tiene poco de realista'.

3. Haga deportes. Basta con practicar un ejercicio suave como caminar a paso rápido media hora al día para que el cerebro secrete endorfinas, esas sustancias nos hacen sentir felices.

4. Sea práctico.Identifiquemos qué es lo verdaderamente importante, y concentrémonos en ello”.

5. Aprenda a meditar. La práctica continuada de ejercicios de meditación contribuye a afrontar mejor los baches de la vida, superar las crisis con mayor fortaleza interior y ser más nosotros mismos bajo cualquier circunstancia.

6. Rodéate de gente positiva y feliz. Las personas positivas y optimistas, no niegan los problemas, ni una realidad poco placentera, sino que tienen la suficiente seguridad personal, amor propio, para saber que pueden cambiar el curso de las cosas, y transformar un momento triste, doloroso, o un fracaso, en una experiencia que nos hará más sabios, o fuertes para seguir avanzando.

7. Vivir el ahora. ¿Mañana tendremos esas cosas aún? Y… No sabemos, pero con certeza, vivir pensando en el pasado, o preocupados por el futuro, nos sacan de la vida que tenemos hoy, que es quizás la vida que nos puede hacer feliz, pero con tanto ruido, no podemos darnos cuenta.