San Pedro Sula, Honduras.
Modernas urbanizaciones, centros comerciales, universidades, edificaciones verticales y visionarias obras de infraestructura convierten al sector noroeste en el de mayor crecimiento en la ciudad.
La construcción de un bulevar de tres kilómetros desde la intersección con el de McKey y que concluirá en el cruce de la carretera hacia Puerto Cortés convierte a la zona en un lugar atractivo para vivir y que está convirtiéndose en una pequeña urbe dentro de la Capital Industrial.
El expresidente de la Cámara Hondureña de Construcción (Chico), Osmín Bautista, expresó que la parte ambiental con el crecimiento urbanístico de la ciudad tiene que conjugarse, y cuando hay un desarrollo de urbanizaciones como Casa Maya y Ciudad Jaraguá es señal que los inversionistas nacionales creen en Honduras. Es un nuevo concepto, son ciudades dentro de otra ciudad con todo lo necesario y con la convivencia como prioridad.
“El noroeste es la zona de más expansión y con más perspectivas de crecimiento en la ciudad”, aseguró. Esas obras que complementarán el desarrollo de esa zona la volverán mucho más atractiva, enfatizó.
Para el presidente del Colegio de Arquitectos de la zona norte, Aldrin Paz, el noreste es uno de los sectores más privilegiados de la ciudad, ya que cuenta con una vista y paisaje excelentes. “Esta zona originalmente se planificó como residencial, y en este momento el crecimiento se está inclinando a este sector. Hay que hacer una planificación correcta”, dijo. El crecimiento en este sitio es urbanístico, pero también comercial porque ya hay un centro comercial: Altara.
A crecer en orden
El presidente del Colegio de Ingenieros Civiles, Martín Mayorquín, también considera que es el que más está creciendo, pero se tiene que tener cuidado porque se puede volver de uso mixto, y hay que velar porque la convivencia sea la más apropiada. “Los centros de servicio generan volúmenes de tráfico diferente al del crecimiento urbanístico y se está haciendo una mezcla de uso de suelo”, indicó.
“Hemos notado que se están construyendo edificios para uso habitacional, que es completamente diferente a una urbanización, y eso concentrará la necesidad de servicios en diferentes formas”, indicó el presidente.
Modernas urbanizaciones, centros comerciales, universidades, edificaciones verticales y visionarias obras de infraestructura convierten al sector noroeste en el de mayor crecimiento en la ciudad.
La construcción de un bulevar de tres kilómetros desde la intersección con el de McKey y que concluirá en el cruce de la carretera hacia Puerto Cortés convierte a la zona en un lugar atractivo para vivir y que está convirtiéndose en una pequeña urbe dentro de la Capital Industrial.
El expresidente de la Cámara Hondureña de Construcción (Chico), Osmín Bautista, expresó que la parte ambiental con el crecimiento urbanístico de la ciudad tiene que conjugarse, y cuando hay un desarrollo de urbanizaciones como Casa Maya y Ciudad Jaraguá es señal que los inversionistas nacionales creen en Honduras. Es un nuevo concepto, son ciudades dentro de otra ciudad con todo lo necesario y con la convivencia como prioridad.
| A un costo de L15 millones, la urbanización Jaraguá construyó un puente que conectará la zona.
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Para el presidente del Colegio de Arquitectos de la zona norte, Aldrin Paz, el noreste es uno de los sectores más privilegiados de la ciudad, ya que cuenta con una vista y paisaje excelentes. “Esta zona originalmente se planificó como residencial, y en este momento el crecimiento se está inclinando a este sector. Hay que hacer una planificación correcta”, dijo. El crecimiento en este sitio es urbanístico, pero también comercial porque ya hay un centro comercial: Altara.
 Dos grandes urbanizaciones se construyen en la zona.
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El presidente del Colegio de Ingenieros Civiles, Martín Mayorquín, también considera que es el que más está creciendo, pero se tiene que tener cuidado porque se puede volver de uso mixto, y hay que velar porque la convivencia sea la más apropiada. “Los centros de servicio generan volúmenes de tráfico diferente al del crecimiento urbanístico y se está haciendo una mezcla de uso de suelo”, indicó.
“Hemos notado que se están construyendo edificios para uso habitacional, que es completamente diferente a una urbanización, y eso concentrará la necesidad de servicios en diferentes formas”, indicó el presidente.
“Se tiene que asegurar que tanto la entrada como la salida del bulevar sea efectiva”, dijo.Los pobladores de Armenta, un sector pobre en medio del desarrollo, ven con buenos ojos ese avance porque aseguran que tendrán calidad de vida, o por lo menos eso esperan.
El presidente del patronato de Armenta, Rafael Vásquez, manifiesta que la Ciudad Jaraguá les hará la conexión de aguas negras y la construcción de una escuela.
