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Declaran en el Ministerio Público ocho testigos que vieron el ataque de Paredes

  • 18 septiembre 2015 /

Tegucigalpa, Honduras.

Testigos que vieron los momentos previos al ataque que acabó con la vida del abogado Eduardo Montes Manzano revelan detalles de una discusión que ocurrió entre el profesional del Derecho y el joven, presunto hechor, Rigoberto Paredes Vélez.

Fuentes ligadas a la investigación del caso revelaron que Montes Manzano era esperado por Paredes Vélez, quien ya tenía en su mano el estilete con el cual le infirió ocho heridas que en cuestión de minutos le quitaron la vida.

Según la narración de testigos oculares, al momento en que el abogado se dirigía al ascensor en el piso 15 de la torre Metropolis I, fue interceptado por Vélez, quien de la nada le comenzó a hacer reclamos sobre su desempeño profesional por ser apoderado legal de Lena Gutiérrez y su familia, acusados por el Ministerio Público de ser socios de la empresa Astropharma y suministrar medicamentos de baja calidad a la Secretaría de Salud.

El forcejeo

El relato de un testigo indica que el abogado le respondió a su verdugo “no jodás”, por lo que Rigoberto lo siguió y lo empujó hacia la pared, adonde le infirió las primeras tres heridas en el pecho. Ante el ataque, el abogado agarró las manos del asesino con la intención de arrebatarle el arma homicida pero durante el forcejeo el profesional del Derecho sufrió varias heridas sin poder arrebatarle el estilete, por lo que apretó el botón del ascensor mientras el forcejeo continuaba.

Durante el intento de defensa, Montes Manzano lanzó un puñetazo a Rigoberto, pero solo le rozó la nariz sin causarle mayor daño y le produjo algunos aruñones en el rostro, casi por la oreja y en sus antebrazos.

Al darse cuenta de su desventaja debido a la corpulencia de su atacante, el abogado apretó el botón del ascensor. La Fiscalía cuenta con el testimonio de al menos ocho personas que observaron los hechos en diferentes momentos y escenarios, por lo que “la prueba testifical también es contundente y las pruebas científicas, más los videos, permitirán que sea un caso que contenga las pruebas completas, en las que se acredite la responsabilidad del hechor en el crimen”, comentó la fuente.

Video es contundente

La fuente reveló que los videos captados por las cámaras del edificio “son contundentes de la responsabilidad del acusado en el crimen contra el abogado Montes”.

Indicó que los peritos están realizando los análisis de los otros videos relacionados con el homicidio, entre ellos las horas en que ingresaron la víctima y el agresor, el momento en que empieza la discusión y el desarrollo de la misma, así como el intento de escape del homicida luego de cometer el crimen en contra de Montes.

La fuente reveló que es una serie de videos los que están siendo analizados por los peritos y los cuales serán presentados durante la audiencia inicial que será el próximo martes a las 8:30 am en los Juzgados de Letras de lo Penal en Comayagüela.

Se informó que el video que demuestra la saña con que se cometió el crimen es el captado por la cámara del elevador. En este video se observa la segunda parte del ataque del que fue víctima Montes.

Una vez que la puerta del ascensor se abre, se observa que un jovencito está dentro del mismo y se asusta cuando ve el forcejeo entre el abogado y Rigoberto.

Manzano es el primero en entrar al elevador, por lo que se produce un nuevo forcejeo entre ellos. Cuando el abogado intenta nuevamente arrebatarle el arma blanca y salvar su vida, este forcejeo es aprovechado por el muchacho para escapar de la escena.

Debido a su corpulencia, Rigoberto logra mantener el control del estilete e infiere más puñaladas al abogado y luego lo empuja hacia la pared del fondo del ascensor, mientras él aprieta los botones para cerrar la puerta y que el elevador baje. Adentro acabó con su vida.