San Pedro Sula, Honduras.
Aunque no hubo diálogo entre los vendedores y las autoridades municipales de San Pedro Sula, la calma ha vuelto al centro de la ciudad.
Tras un desalojo la madrugada de hoy ejecutado por la Policía Municipal los comerciantes que estaban ubicados en la segunda calle armaron una protesta que llegó hasta el interior de la alcaldía.
La Policía Preventiva tuvo que intervenir para tomar el control del centro debido a que se registraron daños a establecimientos comerciales y los dueños de negocios tuvieron que cerrarlos.
Los dirigentes de vendedores señalaron que siempre hay gente con mala intención para causar daños y que no es su responsabilidad lo que ha pasado.
'No tenemos nada que ver con ese tipo de acciones, hemos demostrado ser gente pacífica y nos hemos portado a la altura con las autoridades, no pueden venirnos a achacar esas acciones. Lo de hoy ha sido la reacción por violar los derechos que tenemos como ciudadanos', dijo Juan Carlos Aguilar, uno de los vendedores.
Los comerciantes estacionarios piden a las autoridades municipales una reubicación digna para poder abandonar las calles. La policía mantiene vigilancia en el centro a fin de que el comercio opere normalmente y evitar más disturbios.
