Tegucigalpa, Honduras.
Los cheques emitidos por el Programa de Asignación Familiar (Praf) para la compra de zapatos solicitados por Despacho de la Primera Dama (2010-2014) fueron retirados por Gisela Bonilla, quien era enlace entre ambas dependencias y hermana de la ex primera dama Rosa Elena Bonilla, según informe del Tribunal Superior de Cuentas.
Hace dos días, el TSC informó que remitió al Ministerio Público un expediente por la compra irregular de 7.7 millones de lempiras en zapatos destinados al programa Calzando los Niños de Honduras.
En la carta dirigida al fiscal general, Óscar Chinchilla, se explica que el TSC identificó posibles indicios de responsabilidad penal, por lo que sugiere investigar el caso.
La ex primera dama emitió un comunicado en el que indicó que legal y administrativamente correspondió al Praf la administración de este programa.
Sin embargo, el TSC dice en el documento, en la página número 2, que si bien los cheques fueron desembolsados por el Praf, estos fueron entregados a Gisela Bonilla, enlace entre las instituciones.
“Los pagos de la compras realizadas por el Despacho de la Primera Dama fueron efectuados por el Praf mediante solicitudes que el despacho antes mencionado le hiciera. Los cheques fueron retirados del Praf por la señora Gisela Bonilla, enlace entre el Despacho de la Primera Dama y el Praf; sin embargo, se verificó en los cheques devueltos por el banco que el número de identidad de la persona que efectuó el cobro sí corresponde a las personas a quienes se emitieron los cheques; asimismo, se observó que algunos atributos de las firmas puestas en los recibos difieren con las firmas plasmadas en los cheques cobrados. Por lo que no se pudo constatar que los proveedores que proporcionaron el calzado recibieron efectivamente el pago, ya que los cheques no fueron entregados directamente por el Praf a cada proveedor, sino que fue por medio de la señora Gisela Bonilla, enlace entre el Despacho de la Primera Dama y el Praf”. Se conoció que Bonilla es hermana de Rosa Elena Bonilla de Lobo.
Adquisición
La auditoría detalla que en la explicación de los funcionarios se indica que el proyecto también beneficiaría a pequeños microempresarios; pero no se sabe a qué empresas se les compró el calzado. Dice: “Ángel Orlando Paz, gerente administrativo del Praf, indica que el proceso de compra del calzado fue realizado directamente desde el Despacho de la Primera Dama, con el único propósito en primera instancia de calzar a los niños y niñas de las escuelas focalizadas en extrema pobreza y pobreza.
Asimismo, para apoyar a los pequeños microempresarios; por lo que se procedió a realizar las investigaciones correspondientes en el Despacho de la Primera Dama, pero no se obtuvo información ni se logró obtener evidencia de quiénes fueron las personas encargadas de realizar el proceso de adquisición del calzado”, detalla.
Los cheques emitidos por el Programa de Asignación Familiar (Praf) para la compra de zapatos solicitados por Despacho de la Primera Dama (2010-2014) fueron retirados por Gisela Bonilla, quien era enlace entre ambas dependencias y hermana de la ex primera dama Rosa Elena Bonilla, según informe del Tribunal Superior de Cuentas.
Hace dos días, el TSC informó que remitió al Ministerio Público un expediente por la compra irregular de 7.7 millones de lempiras en zapatos destinados al programa Calzando los Niños de Honduras.
En la carta dirigida al fiscal general, Óscar Chinchilla, se explica que el TSC identificó posibles indicios de responsabilidad penal, por lo que sugiere investigar el caso.
La ex primera dama emitió un comunicado en el que indicó que legal y administrativamente correspondió al Praf la administración de este programa.
Sin embargo, el TSC dice en el documento, en la página número 2, que si bien los cheques fueron desembolsados por el Praf, estos fueron entregados a Gisela Bonilla, enlace entre las instituciones.
“Los pagos de la compras realizadas por el Despacho de la Primera Dama fueron efectuados por el Praf mediante solicitudes que el despacho antes mencionado le hiciera. Los cheques fueron retirados del Praf por la señora Gisela Bonilla, enlace entre el Despacho de la Primera Dama y el Praf; sin embargo, se verificó en los cheques devueltos por el banco que el número de identidad de la persona que efectuó el cobro sí corresponde a las personas a quienes se emitieron los cheques; asimismo, se observó que algunos atributos de las firmas puestas en los recibos difieren con las firmas plasmadas en los cheques cobrados. Por lo que no se pudo constatar que los proveedores que proporcionaron el calzado recibieron efectivamente el pago, ya que los cheques no fueron entregados directamente por el Praf a cada proveedor, sino que fue por medio de la señora Gisela Bonilla, enlace entre el Despacho de la Primera Dama y el Praf”. Se conoció que Bonilla es hermana de Rosa Elena Bonilla de Lobo.
Adquisición
La auditoría detalla que en la explicación de los funcionarios se indica que el proyecto también beneficiaría a pequeños microempresarios; pero no se sabe a qué empresas se les compró el calzado. Dice: “Ángel Orlando Paz, gerente administrativo del Praf, indica que el proceso de compra del calzado fue realizado directamente desde el Despacho de la Primera Dama, con el único propósito en primera instancia de calzar a los niños y niñas de las escuelas focalizadas en extrema pobreza y pobreza.
Asimismo, para apoyar a los pequeños microempresarios; por lo que se procedió a realizar las investigaciones correspondientes en el Despacho de la Primera Dama, pero no se obtuvo información ni se logró obtener evidencia de quiénes fueron las personas encargadas de realizar el proceso de adquisición del calzado”, detalla.
