Puerto Lempira, Honduras.
La mayoría de los centros de educación básica del departamento de Gracias a Dios no están funcionando. Las autoridades de Educación de la localidad no han renovado el contrato a los docentes que laboraron el año pasado.
Esta situación mantiene preocupados a muchos padres de familia y otros sectores de la región, quienes por temor a los intereses que se están jugando en el proceso de selección de docentes en el departamento no habían denunciado estas irregularidades. La politización y el tráfico de influencias, aseguran, son las formas con las que se está manejando el proceso de selección de docentes. “Las autoridades departamentales no han convocado a la Junta de Selección cuando en otros departamentos ya lo hicieron, y los políticos están haciendo y deshaciendo con todo, nombrando gente a su antojo”, denunció un dirigente de esta región.
Esta problemática mantiene funcionando a medias el 20% de los más de 50 centros básicos que hay en todo el departamento. “Es decir, solo se están dando clases de primero a sexto grado; pero el resto, que es el 80%, está paralizado”, estimó el dirigente.
Los padres de familia, algunos docentes y dirigentes magisteriales tienen que llamarse al silencio, debido a las amenazas que reciben de políticos “que no piensan en el bienestar del pueblo, sino en los intereses partidarios y personales, mientras muchos niños están sin asistir a clases”. Son 300 docentes a los que no se les ha prorrogado su nombramiento en plazas que han estado trabajando desde el año pasado en estos centros educativos y que se las ganaron por concurso. Según un oficio de Educación, debe dárseles prioridad, y actualmente están siendo sustituidos por otros nombramientos al margen de la ley.
La mayoría de los centros de educación básica del departamento de Gracias a Dios no están funcionando. Las autoridades de Educación de la localidad no han renovado el contrato a los docentes que laboraron el año pasado.
Esta situación mantiene preocupados a muchos padres de familia y otros sectores de la región, quienes por temor a los intereses que se están jugando en el proceso de selección de docentes en el departamento no habían denunciado estas irregularidades. La politización y el tráfico de influencias, aseguran, son las formas con las que se está manejando el proceso de selección de docentes. “Las autoridades departamentales no han convocado a la Junta de Selección cuando en otros departamentos ya lo hicieron, y los políticos están haciendo y deshaciendo con todo, nombrando gente a su antojo”, denunció un dirigente de esta región.
Esta problemática mantiene funcionando a medias el 20% de los más de 50 centros básicos que hay en todo el departamento. “Es decir, solo se están dando clases de primero a sexto grado; pero el resto, que es el 80%, está paralizado”, estimó el dirigente.
Los padres de familia, algunos docentes y dirigentes magisteriales tienen que llamarse al silencio, debido a las amenazas que reciben de políticos “que no piensan en el bienestar del pueblo, sino en los intereses partidarios y personales, mientras muchos niños están sin asistir a clases”. Son 300 docentes a los que no se les ha prorrogado su nombramiento en plazas que han estado trabajando desde el año pasado en estos centros educativos y que se las ganaron por concurso. Según un oficio de Educación, debe dárseles prioridad, y actualmente están siendo sustituidos por otros nombramientos al margen de la ley.
