San Salvador.
Los ciudadanos salvadoreños, especialmente los que día a día se desplazan a sus sitios de trabajo en diferentes medios de transporte público, le dan un voto de confianza al presidente electo de ese país, Nayib Bukele, para que cree mejores condiciones de vida en esa pequeña nación centroamericana.
La base que sustentan esas esperanzas es que
Bukele rompió los paradigmas del sistema de elección, y por lo pronto acabó con diez años continuos de Gobierno del
Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (Fmln), al mismo tiempo extendió la sequía en el poder de la Alianza Republicana Nacionalista (Arena).
La gran esperanza es que en la elecciones parlamentarias de 2021, la integración de las fuerzas políticas cambie y estas allanen el camino para que el Ejecutivo proponga
cambios de políticas económicas y sociales que solo pueden hacerse desde esa instancia.
Es irreverente
Diario LA PRENSA se internó en las entrañas de San Salvador para conocer de viva voz de los residentes sus aspiraciones.
Para Carlos Alvarado, un taxista que trabaja por llamadas de sus clientes, ya que no cuenta con permiso para operar en puntos autorizados, narró que la forma de actuar de Bukele lo distingue de los demás gobernantes que ha tenido ese país en las últimas décadas.
“Su forma de actuar a veces es irreverente y eso hace que muchos salvadoreños tengamos esperanzas de que haya cambios importantes”, dijo el ruletero.
Continuó expresando que el gobernante electo de ascendencia palestina marca la diferencia, incluso, hasta en su forma de dirigirse en los medios de comunicación, ya que solamente utiliza los diferentes canales de las redes sociales.
Como ocurre en toda la región, los salvadoreños también esperan cambios de políticas para crear nuevos empleos, mejorar las condiciones de seguridad ciudadana y sanitarias, ya que el
Seguro Social y el
sistema hospitalario público es deficiente.
Karla Moreno, recepcionista de un hotel, quien tuvo que dejar de estudiar para llevar ingresos a su casa, sueña con más acciones para reducir los espacios que ha ganado la delincuencia, especialmente la pandillas 18 y la Salvatrucha (MS).
Moreno también aspira a que los hospitales se surtan de medicamentos, para que no se repita lo de una amiga suya a quien por falta de medicamentos le suspendieron sus sesiones de diálisis.
José Santos Palacios, un guardia de seguridad y veterano de guerra, espera que Bukele cumpla sus promesas de campaña, sobre todo en materia de seguridad y creación de empleos.
José Flores, marino y estudiante de la lengua náhuatl, espera que el Presidente electo potencie la actividad turística y marítima y fortalezca las relaciones políticas con Honduras.
Los ciudadanos salvadoreños, especialmente los que día a día se desplazan a sus sitios de trabajo en diferentes medios de transporte público, le dan un voto de confianza al presidente electo de ese país, Nayib Bukele, para que cree mejores condiciones de vida en esa pequeña nación centroamericana.
Lea: Se agudiza la tensión entre Nayib Bukele y el presidente Hernández
Los salvadoreños también le piden al mandatario electo mantener vivas las relaciones de amistad y comercio con Honduras, ya que hay muchos pueblos fronterizos que tienen una interacción comercial permanente que no debe ser alterada por posiciones de orden político.
En los mercados de la metrópoli salvadoreña, muchos ciudadanos dependen del intercambio de bienes y servicios con Honduras y no quieren que ese flujo comercial sufra exabruptos.
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Desde el pacífico y otras latitudes de El Salvador cruzan Honduras y llegan hasta la costa atlántica y otros sitios del territorio nacional para comprar frutas, hortalizas, granos básicos y muchos productos que ayudan a la dieta alimenticia del Pulgarcito de Centroamérica.
| Como sucede en Honduras, millones de salvadoreños se ganan la vida en diferentes actividades del comercio informal debido a que la tasa de desempleo supera el 6%.
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La convicción de los salvadoreños es que Bukele después de ser expulsado del Fmln fundó el 24 de agosto de 2018 su partido Nuevas Ideas y se unió al pequeño partido Gran Alianza por la Unidad Nacional (Gana) que cuenta con diez diputados.
Aunque el discurso de Bukele es motivador por su forma peculiar de enfrentar a sus contrincantes y señalarlos directamente de corruptos, en algunos casos, los hace tomar sus reservas.
Una de esas reservas es que Bukele no tiene ningún diputado en la Asamblea Legislativa y su brazo aliado, Gana, solo cuenta con 10 parlamentarios, que están lejos de, al menos, formar mayoría simple, ya que la cámara está compuesta por 84 congresistas.
| En la capital San Salvador, muchos ciudadanos conducen taxis para llevar el sustento diario a sus casas.
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Es irreverente
Diario LA PRENSA se internó en las entrañas de San Salvador para conocer de viva voz de los residentes sus aspiraciones.
Para Carlos Alvarado, un taxista que trabaja por llamadas de sus clientes, ya que no cuenta con permiso para operar en puntos autorizados, narró que la forma de actuar de Bukele lo distingue de los demás gobernantes que ha tenido ese país en las últimas décadas.
“Su forma de actuar a veces es irreverente y eso hace que muchos salvadoreños tengamos esperanzas de que haya cambios importantes”, dijo el ruletero.
Continuó expresando que el gobernante electo de ascendencia palestina marca la diferencia, incluso, hasta en su forma de dirigirse en los medios de comunicación, ya que solamente utiliza los diferentes canales de las redes sociales.
| En medio de ese duro transitar, los ciudadanos se dan su tiempo para rendir culto a su fe y no perder las esperanzas de vivir mejor.
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Karla Moreno, recepcionista de un hotel, quien tuvo que dejar de estudiar para llevar ingresos a su casa, sueña con más acciones para reducir los espacios que ha ganado la delincuencia, especialmente la pandillas 18 y la Salvatrucha (MS).
Moreno también aspira a que los hospitales se surtan de medicamentos, para que no se repita lo de una amiga suya a quien por falta de medicamentos le suspendieron sus sesiones de diálisis.
José Santos Palacios, un guardia de seguridad y veterano de guerra, espera que Bukele cumpla sus promesas de campaña, sobre todo en materia de seguridad y creación de empleos.
José Flores, marino y estudiante de la lengua náhuatl, espera que el Presidente electo potencie la actividad turística y marítima y fortalezca las relaciones políticas con Honduras.
