Ciudad del Vaticano.
El obispo auxiliar de Tegucigalpa, Juan José Pineda Fasquelle, investigado por irregularidades en la diócesis y por mala conducta, emitió esta mañana una carta pública en la que confirma que la Santa Sede le aceptó la renuncia como Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis.
'No puedo dejar de agradecer a mi familia religiosa, con quienes sigo unido por el vínculo y de la Profesion Religiosa, como Misionero Claretiano', indica en un párrafo el religioso.
Agrega: 'He intentado, con todo mi corazón, servir a esta porción del Pueblo de Dios, a su Arzobispo, Clero, Seminaristas y Pueblo de Dios. Si lo logré, bendito sea Dios. Si les fallé, pido perdón'.
LEA: El Papa acepta la renuncia del obispo Juan José Pineda acusado de abusos sexuales
Explica además que 'las razones y los motivos los conocen Dios y mis superiores. He actuado con plena conciencia y libertad. Quisiera que todos estemos en paz'.
La investigación contra Pineda fue encargada el pasado diciembre por Papa Francisco.
El semanario italiano 'L'Espresso' había publicado un reportaje sobre el desvío de 41,600 dólares mensuales procedentes de la Universidad Católica de la capital de Honduras a la diócesis del cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga.
Según este rotativo, la investigación también incluía el comportamiento inapropiado de Pineda, de 57 años.
Pineda gestionó la diócesis en numerosas ocasiones cuando Maradiaga viajaba a Roma o cuando, hace unos meses, se sometió a sesiones de quimioterapia en Houston (Estados Unidos) por un cáncer de próstata.
El obispo, de 57 años, ha sido durante mucho tiempo objeto de acusaciones de fallas financieras, así como de rumores de que ofreció apoyo a un compañero masculino que utiliza fondos arquidiocesanos. Se desempeña como consejero papal y arzobispo de Tegucigalpa.
En marzo, el National Catholic Register informó que dos exseminaristas también habían presentado testimonios personales al Vaticano acusando a Pineda de agresión sexual y de intentar relaciones sexuales no deseadas.
El anuncio del 20 de julio de la renuncia de Pineda no dio ninguna explicación, indicando solo que había sido aceptado por el Papa Francisco.
Las acusaciones contra Pineda incluyen la construcción de un departamento en el campus de la Universidad Católica de Honduras para albergar a un compañero masculino. Según el Registro, los dos seminaristas que acusaron a Pineda de insinuaciones sexuales no deseadas también alegaron que tomó medidas punitivas contra ellos después de que sus avances no fueron aceptados.
El obispo auxiliar de Tegucigalpa, Juan José Pineda Fasquelle, investigado por irregularidades en la diócesis y por mala conducta, emitió esta mañana una carta pública en la que confirma que la Santa Sede le aceptó la renuncia como Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis.
'No puedo dejar de agradecer a mi familia religiosa, con quienes sigo unido por el vínculo y de la Profesion Religiosa, como Misionero Claretiano', indica en un párrafo el religioso.
Agrega: 'He intentado, con todo mi corazón, servir a esta porción del Pueblo de Dios, a su Arzobispo, Clero, Seminaristas y Pueblo de Dios. Si lo logré, bendito sea Dios. Si les fallé, pido perdón'.
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Explica además que 'las razones y los motivos los conocen Dios y mis superiores. He actuado con plena conciencia y libertad. Quisiera que todos estemos en paz'.
La investigación contra Pineda fue encargada el pasado diciembre por Papa Francisco.
El semanario italiano 'L'Espresso' había publicado un reportaje sobre el desvío de 41,600 dólares mensuales procedentes de la Universidad Católica de la capital de Honduras a la diócesis del cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga.
Según este rotativo, la investigación también incluía el comportamiento inapropiado de Pineda, de 57 años.
Pineda gestionó la diócesis en numerosas ocasiones cuando Maradiaga viajaba a Roma o cuando, hace unos meses, se sometió a sesiones de quimioterapia en Houston (Estados Unidos) por un cáncer de próstata.
El obispo, de 57 años, ha sido durante mucho tiempo objeto de acusaciones de fallas financieras, así como de rumores de que ofreció apoyo a un compañero masculino que utiliza fondos arquidiocesanos. Se desempeña como consejero papal y arzobispo de Tegucigalpa.
En marzo, el National Catholic Register informó que dos exseminaristas también habían presentado testimonios personales al Vaticano acusando a Pineda de agresión sexual y de intentar relaciones sexuales no deseadas.
El anuncio del 20 de julio de la renuncia de Pineda no dio ninguna explicación, indicando solo que había sido aceptado por el Papa Francisco.
Las acusaciones contra Pineda incluyen la construcción de un departamento en el campus de la Universidad Católica de Honduras para albergar a un compañero masculino. Según el Registro, los dos seminaristas que acusaron a Pineda de insinuaciones sexuales no deseadas también alegaron que tomó medidas punitivas contra ellos después de que sus avances no fueron aceptados.
