Tegucigalpa, Honduras.
“Escuchamos el estruendo y lo único que hicimos fue quedarnos viendo cómo caía el avión y se estrellaba en el paredón”, relató María Antonia Pérez, vecina del sector de Jardines de Toncontín, más conocido como Camosa.
“Estaba afuera en el portón con mi abuela porque ya nos íbamos a ir a comprar al supermercado cuando de repente oímos el ruido fuerte como del motor de un avión, pero nunca imaginamos que otra vez se vendría a estrellar otro como la vez pasada”, contó la capitalina.
La mujer comentó que no corrió debido a que está acostumbrada a ver cosas fuertes en los hospitales, ya que labora como enfermera.
Aseguró que “no escuché ni gritos ni nada, pero rápido había gente queriendo ayudar a los pasajeros, vimos saliendo caminar a cinco personas del avión”.
María Antonia reside desde hace algunos años en una cuartería, ubicada a unos 15 metros de donde se fue a estrellar el jet, y aseguró que de vez en cuando sienten temor por si otro llegara a impactar con sus viviendas.
La vía es muy transitada y de milagro no circulaban carros al momento del suceso.
“Escuchamos el estruendo y lo único que hicimos fue quedarnos viendo cómo caía el avión y se estrellaba en el paredón”, relató María Antonia Pérez, vecina del sector de Jardines de Toncontín, más conocido como Camosa.
“Estaba afuera en el portón con mi abuela porque ya nos íbamos a ir a comprar al supermercado cuando de repente oímos el ruido fuerte como del motor de un avión, pero nunca imaginamos que otra vez se vendría a estrellar otro como la vez pasada”, contó la capitalina.
La mujer comentó que no corrió debido a que está acostumbrada a ver cosas fuertes en los hospitales, ya que labora como enfermera.
Aseguró que “no escuché ni gritos ni nada, pero rápido había gente queriendo ayudar a los pasajeros, vimos saliendo caminar a cinco personas del avión”.
María Antonia reside desde hace algunos años en una cuartería, ubicada a unos 15 metros de donde se fue a estrellar el jet, y aseguró que de vez en cuando sienten temor por si otro llegara a impactar con sus viviendas.
La vía es muy transitada y de milagro no circulaban carros al momento del suceso.