Tegucigalpa, Honduras.
La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah), ocupada durante tres meses por estudiantes que exigían la renuncia de su rectora, Julieta Castellanos, reinició hoy parcialmente clases debido a la ocupación de edificios por parte de universitarios que piden la cancelación de medidas judiciales contra 24 alumnos.
Las autoridades de la Unah indicaron en un comunicado que en Tegucigalpa varios universitarios, entre ellos los 24 acusados de usurpación de bienes públicos y que tienen medidas sustitutivas a la prisión, ocuparon varios edificios 'haciendo uso de los mismos mecanismos de fuerza para impedir el acceso a las aulas'.
'Ante estas acciones, las autoridades universitarias procederán a solicitar la revisión de medidas' dictadas a los 24 universitarios, detenidos el viernes pasado durante un desalojó pacífico en las instalaciones de la Universidad tras más de tres meses de protesta del Movimiento Estudiantil Universitario (MEU) para exigir la renuncia de Castellanos, añadió.
Los 24 universitarios tienen 'prohibido acudir a reuniones o manifestaciones' en la UNAH con el fin de ocupar edificios e impedir la libre circulación de estudiantes, docentes y empleados administrativos, indicaron las autoridades universitarias.
Además, tienen prohibido mantener comunicación entre ellos, salir del país y deben presentarse a firmar cada 15 días en el juzgado hondureño, añadió la institución educativa.
'El Tribunal estableció que de no cumplirse estas medidas sustitutivas, se les castigaría con prisión preventiva', precisaron.
Marcio Silva, miembro del MEU, dijo a periodistas que en Tegucigalpa las clases no iniciarán hasta el 26 de septiembre, un día después de que Castellanos deje la rectoría.
'Lo que hacemos son asambleas para informar lo que está sucediendo, por eso proponemos el retorno de clases el 26 de septiembre', señaló.
Las actividades del segundo período, que debió concluir el 3 de septiembre, estaban suspendidas desde el 5 de junio en Tegucigalpa debido a las manifestaciones y los obstáculos que han puesto los miembros del MEU, que lideran las protestas y exigen que la rectora Julieta Castellanos renuncie y la creación de un gobierno universitario de transición.
El Parlamento hondureño aprobó a finales de agosto una propuesta en la que se solicitó el nombramiento de un rector interino en la polémica universidad luego de que concluya el período de Castellanos para tratar de poner fin a la crisis, sin embargo, el MEU rechaza el reinicio de clases en Tegucigalpa.
En el centro universitario de San Pedro Sula, norte hondureño, las actividades se reanudaron también parcialmente, pues miembros del MEU bloquearon con sillas varios edificios, lo que impide que los estudiantes reciban clases.
El director del centro regional, Francisco Herrera, dijo a periodistas que los miembros del MEU, todos con el 'rostro cubierto', han colocado 'cadenas' en el edificio administrativo para evitar que los docentes pueden ingresar y así iniciar sus actividades.
La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah), ocupada durante tres meses por estudiantes que exigían la renuncia de su rectora, Julieta Castellanos, reinició hoy parcialmente clases debido a la ocupación de edificios por parte de universitarios que piden la cancelación de medidas judiciales contra 24 alumnos.
Las autoridades de la Unah indicaron en un comunicado que en Tegucigalpa varios universitarios, entre ellos los 24 acusados de usurpación de bienes públicos y que tienen medidas sustitutivas a la prisión, ocuparon varios edificios 'haciendo uso de los mismos mecanismos de fuerza para impedir el acceso a las aulas'.
'Ante estas acciones, las autoridades universitarias procederán a solicitar la revisión de medidas' dictadas a los 24 universitarios, detenidos el viernes pasado durante un desalojó pacífico en las instalaciones de la Universidad tras más de tres meses de protesta del Movimiento Estudiantil Universitario (MEU) para exigir la renuncia de Castellanos, añadió.
Los 24 universitarios tienen 'prohibido acudir a reuniones o manifestaciones' en la UNAH con el fin de ocupar edificios e impedir la libre circulación de estudiantes, docentes y empleados administrativos, indicaron las autoridades universitarias.
Además, tienen prohibido mantener comunicación entre ellos, salir del país y deben presentarse a firmar cada 15 días en el juzgado hondureño, añadió la institución educativa.
'El Tribunal estableció que de no cumplirse estas medidas sustitutivas, se les castigaría con prisión preventiva', precisaron.
Marcio Silva, miembro del MEU, dijo a periodistas que en Tegucigalpa las clases no iniciarán hasta el 26 de septiembre, un día después de que Castellanos deje la rectoría.
'Lo que hacemos son asambleas para informar lo que está sucediendo, por eso proponemos el retorno de clases el 26 de septiembre', señaló.
Las actividades del segundo período, que debió concluir el 3 de septiembre, estaban suspendidas desde el 5 de junio en Tegucigalpa debido a las manifestaciones y los obstáculos que han puesto los miembros del MEU, que lideran las protestas y exigen que la rectora Julieta Castellanos renuncie y la creación de un gobierno universitario de transición.
El Parlamento hondureño aprobó a finales de agosto una propuesta en la que se solicitó el nombramiento de un rector interino en la polémica universidad luego de que concluya el período de Castellanos para tratar de poner fin a la crisis, sin embargo, el MEU rechaza el reinicio de clases en Tegucigalpa.
En el centro universitario de San Pedro Sula, norte hondureño, las actividades se reanudaron también parcialmente, pues miembros del MEU bloquearon con sillas varios edificios, lo que impide que los estudiantes reciban clases.
El director del centro regional, Francisco Herrera, dijo a periodistas que los miembros del MEU, todos con el 'rostro cubierto', han colocado 'cadenas' en el edificio administrativo para evitar que los docentes pueden ingresar y así iniciar sus actividades.
