San Pedro Sula, Honduras
“Llevamos más de un mes sin agua, el único pozo que abastecía a la comunidad de repente quedó seco, y no hay otro cerca, me ha tocado comprar el líquido a un señor que maneja un camión a un precio de entre 250 y 300 lempiras para llenar la pila”, lamentó Beatriz García (de 65 años), quien al igual que miles de pobladores del municipio de San Manuel lleva más de un mes sin recibir el vital líquido.
Tres pozos que abastecían de agua a estos lugares no están produciendo nada. También se alimentaban de un acuífero, el cual según los pobladores está seco.
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pies de profundidad se deben perforar para encontrar agua de los mantos acuíferos. Antes la medida de perforación de pozos era de 220 pies.
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En una humilde vivienda en la colonia Nueva Esperanza, ajena a lo que pueda pasar en un futuro, Juana Coronado (de 71) trata de mitigar la necesidad de agua comprándola, o esperando la llegada de dos cisternas que han puesto a la disposición las autoridades municipales como un paliativo, mientras realizan las gestiones necesarias para una pronta solución de la crisis.
Este municipio forma parte de los 21 que conforman la vasta región del valle de Sula, donde se concentra mucha vegetación, y varias fuentes de agua entre ríos, riachuelos, quebradas y aguas subterráneas, como acuíferos que también suplen de agua a los habitantes. A juicio del consultor Alfredo Dipalma, el valle de Sula cuenta con suficientes recursos superficiales y subterráneos de agua que deben ser aprovechados de forma eficaz por las municipalidades.
Considera que deben buscar financiamiento internacional para aprovechar mejor los pozos, que deben recibir buen mantenimiento.
| Bajo el inclemente sol, algunos habitantes salen a buscar agua para llevarla a sus hogares en San Manuel.
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Otros factores como el cambio climático, la destrucción del bosque, la falta de un mejor control por mantener a la naturaleza viva, ahora está pasando una factura alta a esta región rodeada por las montañas de El Merendón y Mico Quemado, donde en municipios como Villanueva y San Manuel se están presentando graves problemas por la escasez de este vital líquido.
| Dato
En San Pedro Sula, la cobertura es amplia. El 95% del área concesionada está cubierta con agua potable, es la segunda ciudad, después de Puerto Cortés, con los mejores indicadores a nivel nacional.
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Perforaciones ilegales
En un recorrido por la zona adonde se concentran los tres pozos en las comunidades de La Nueva Esperanza, Betel, Villavinda y alrededores en la parte alta del noreste del municipio de San Manuel que colinda con la montaña de El Sate, se pudo conocer que parte del acuífero se ha secado, lo cual es alarmante porque es la única fuente cercana para que los pobladores continúen recibiendo el vital líquido. “En unas 15 comunidades hay problemas de sequedad de agua en los pozos, lo que está afectando a unas 10,000 familias, por lo cual la Corporación Municipal de San Manuel ha declarado emergencia a nivel del municipio”, detalló el jefe del Departamento Municipal de Ambiente, Juan Serrano.
Destacó que han solicitado un control en la perforación de pozos, porque hay muchos que se han hecho de forma ilegal, sobre todo en La Sabana, El Plan, las colonias Betel, Villavinda, Nueva Esperanza, y en el El Porvenir. El jefe de Obras Públicas, Michael Yánez, agregó que por el momento en dos cisternas llevan el vital líquido a los hogares, aunque no a todos porque están en lo alto de los cerros.
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Menos afectados
A pocos kilómetros de San Manuel se encuentra el municipio de Villanueva, donde también hay escasez de agua.
“Hemos mejorado sustancialmente el horario de servicio en la parte urbana, pero no significa que no tengamos crisis en determinados sectores, como Dos Caminos y Los Higos”, expresó el gerente de Aguas del Valle, Pedro Velásquez.
En otros municipios de la región, como San Pedro Sula, Omoa y Puerto Cortés no se registran problemas por escasez de agua y el servicio se da las 24 horas sin interrupciones. Municipios como Santa Cruz y San Francisco, que tiene abundancia de fuentes superficiales, tampoco reportan falta de agua.
En localidades como Potrerillos, Pimienta, Morazán, La Lima y Choloma sí racionan el servicio. Estos municipios están en la parte más plana del valle, por lo que dependen más de los pozos.
En Potrerillos, por ejemplo, dan agua dos veces al día. Por la mañana dan de tres a cuatro horas y por la tarde igual. Se ven en la obligación de racionar porque su suministro depende en su mayoría de pozos que extraen agua de los acuíferos.
En Pimienta hay 10 pozos en funcionamiento que abastecen a la población, pero también racionan el servicio para evitar que se sequen las fuentes subterráneas.
| Vecinas de la colonia Nueva Esperanza, de San Manuel, alistan las cubetas y pilas para almacenar el agua.
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