La ansiedad y tristezas complices para que se coma de más

La culpabilidad eleva la ansiedad y las personas corren el riesgo de volver a comer en exceso

  • 23 abr 2015

México

La imagen de la chica en pijama comiendo directo del envase de helado porque está deprimida puede sonar a cliché, pero la realidad es que hay personas que, sin darse cuenta, comen en exceso para evadir la ansiedad o la tristeza.

El problema ocurre cuando estos episodios son recurrentes y se genera un cuadro de culpabilidad, que provoca ansiedad y se repite el atracón, advierte Armando Barriguete Meléndez, consultor de la Clínica de Obesidad y Trastornos de la Alimentación del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición.

'La persona ingiere cantidades excesivas de comida sin pensar y cuando termina se da cuenta de que comió muchísimo más de lo que hubiera querido, pero es algo que no pudo controlar. De hecho en el momento en que está comiendo no se da cuenta', detalla.


Después se sienten incómodamente llenos. Este trastorno se asocia al sobrepeso o la obesidad.

El también fundador y director de la Clínica Ángeles Trastornos de la Conducta Alimentaria, señala qué esta alteración es más común en las mujeres.

La razón por la que la persona no repara en la cantidad de comida que está ingiriendo es que se encuentra en un estado de ansiedad, depresión, enojo, tensión o estrés elevado que tratan de evadir través de la comida.

'Imaginemos a una adolescente que está esperando que llegue un galán nuevo. Empieza a ponerse nerviosa porque no llega y empieza a pensar que tal vez la deje plantada; de repente voltea y ve que en la mesa hay un plato con cacahuates, incluso podrían no gustarle, pero en medio de los nervios se comió un plato entero de cacahuates sin darse cuenta', ejemplifica.

Cambios severos

A diferencia de otras alteraciones de la conducta alimentaria como la bulimia, en el trastorno por atracón, las personas sienten culpa pero no vomitan ni utilizan laxantes.


'Se sienten muy culpables. Se sienten mal emocional y físicamente. Puede ser que se queden dormidos porque fue mucho lo que comieron, pero les queda una culpa tremenda y empiezan a recriminarse por lo que hicieron'.

La culpabilidad eleva la ansiedad y las personas corren el riesgo de volver a comer en exceso para evadir lo que sienten, refiere.

Cuando esto sucede más de dos veces por semana durante los últimos tres meses y está relacionado con momentos de estrés, ansiedad o cualquier emoción negativa, esto puede deberse al trastorno por atracón.
Barriguete advierte que los malos hábitos de alimentación son un factor de riesgo que pueden poner al borde de desarrollar trastornos de este tipo.

De acuerdo con el Centro Integral de Diagnóstico y Tratamiento de Médica Sur, el diagnóstico y tratamiento de los trastornos de la conducta alimentaria deben ser multidisciplinarios y contar con el apoyo de la familia para lograr la recuperación del paciente.

Factores de riesgo
La presencia de atracones está relacionada con
1. Fluctuación en el peso
2. Inestabilidad emocional
3. La autoevaluación exageradamente influida por el peso y la silueta corporal
4. Cambios en el estado de ánimo, irritabilidad, vergüenza, sentimientos negativos de coraje y miedo, aislamiento social
5. Consumo de alcohol
6. Vivir situaciones de violencia

Síntomas
1. El enfermo hace muchas dietas y las rompe constantemente
2. Come poco en público y muy rápido
3. Consume gran cantidad de comida chatarra
4. El peso es el foco de atención de su vida

Consecuencias
Los problemas de salud que se presentan son los ligados con el sobrepeso como:
-Hipertensión arterial
-Enfermedades cardiovasculares
-Dislipidemias con aumento de colesterol y triglicéridos
-Diabetes mellitus
-Hiper o hipoglucemia
-Infarto del miocardio
-Eventos vasculares cerebrales y la muerte.