Su cuerpo necesita vitamina D, la vitamina “de la luz solar”, pero un exceso de tiempo bajo el sol puede aumentar su riesgo de cáncer de piel.
Un experto ofrece consejos para mejorar la ingesta de vitamina D al mismo tiempo que permanece seguro del sol y de las históricas temperaturas de este verano.
Importancia
“La vitamina D es necesaria para la salud de los huesos, la absorción del calcio, la reducción de la inflamación, promover el crecimiento de las células y el respaldo cardiovascular”, señaló el Dr. Mike Ren, profesor asistente de medicina familiar y comunitaria del Colegio de Medicina Baylor, en Houston.
“Las personas pueden tener una deficiencia de vitamina D durante unos meses y estar bien, pero unos niveles bajos prolongados pueden hacer que la salud de los huesos y de la tiroides se deteriore”, advirtió Ren en un comunicado de prensa del colegio.
Se necesitan apenas de unos 10 a 30 minutos de exposición directa al día a la luz del sol para garantizar la producción de vitamina D, dijo Ren.
El cuerpo obtiene vitamina D cuando los rayos ultravioleta iluminan la piel. Entonces, el hígado y los riñones lo convierten en vitamina D utilizable.
Cuidados
Los protectores solares y la ropa protectora pueden prevenir la absorción de la luz del sol; pero es poco probable que estas medidas de seguridad tengan un impacto intenso en la producción de vitamina D.
“No tiene que salir al aire libre a asarse para tener la ingesta diaria de luz solar. Solo saque unos minutos al día para hacer algo de actividad física bajo el sol”, aconsejó Ren.
¿Cómo obtenerla?
Los alimentos también proveen este nutriente. Con una dieta bien equilibrada, las personas pueden obtener la cantidad necesaria de vitamina D.
El pescado graso, las proteínas magras, los huevos y los productos lácteos fortificados la contienen. Los complementos también pueden ayudar.
“Las personas pueden sufrir de distintas afecciones que eviten que obtengan la vitamina D de los alimentos o de la luz del sol, así que es importante que sean conscientes de todas sus opciones”, planteó Ren.
“El origen de la vitamina D tampoco es importante. Ya sea de una combinación de luz del sol y la dieta, o puramente de complementos, todas las formas de ingesta pueden funcionar”.
Debe verificar sus niveles de vitamina D en su chequeo anual, planteó Ren. Las personas con unos niveles bajos de vitamina D inicialmente son asintomáticas, pero las pruebas anuales pueden revelar deficiencias.
“Si hay una deficiencia grave de vitamina D, su proveedor de atención de la salud puede darle un plan de atención que incluya complementos recetados que tienen unas concentraciones más altas, en comparación con los complementos de venta libre”, añadió Ren.
Si usted no consume suficiente calcio en su dieta o si el cuerpo no absorbe suficiente calcio a causa de un nivel bajo de vitamina D, la producción de hueso y los tejidos óseos pueden sufrir.
Alimentos con vitamina D
Los pescados grasos (atún, salmón y caballa) están entre las mejores fuentes de vitamina D.El hígado de res, el queso y las yemas de los huevos suministran pequeñas cantidades. Los champiñones proporcionan vitamina D.
Los que se venden en tienda tienen un mayor contenido de vitamina D porque han sido expuestos a la luz ultravioleta. La vitamina D se le agrega a muchos cereales. También a algunas marcas de bebidas de soya, jugo de naranja, yogur y margarina.
