Ahora los hermanos son la fuente principal de contagio de tos ferina en los bebés

La tos ferina puede causar problemas neurológicos

  • 10 sep 2015

Estados Unidos

Cuando los bebés contraen la tos ferina lo más probable es que se hayan contagiado de un hermano, según una nueva investigación.

Esto supone un cambio con respecto al pasado, cuando las madres eran la fuente de contagio más frecuente. Pero el cambio no es sorprendente, dijo la autora del estudio, Tami Skoff, investigadora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.

Durante años ha sido evidente que los casos de tos ferina (o pertussis) están en aumento en Estados Unidos. En 2012, se reportaron más de 48,000 casos en todo el país, la cantidad más alta desde 1955, según los CDC.

Además, los niños mayores y los adolescentes son responsables de una proporción cada vez mayor de casos.

Una razón importante para esto es que en los 90, las autoridades sanitarias de Estados Unidos cambiaron la vacuna tradicional para la tos ferina por una más reciente llamada DTaP, debido a las preocupaciones existentes sobre los problemas neurológicos relacionados con la anterior vacuna, dijo Skoff.

El inconveniente es que los efectos de la vacuna DTaP no duran mucho tiempo.

'La vacuna es muy efectiva a corto plazo', enfatizó Skoff. Pero los CDC estiman que la inmunidad contra la tos ferina se desvanece lentamente cada año después de la última dosis administrada al niño, cuando tiene unos 5 años.

Si los niños vacunados finalmente contraen la infección, quizá no enfermen mucho, indicó Skoff.

Pero la pueden contagiar a los niños pequeños, que están en riesgo de enfermar gravemente. La mitad de los bebés menores de 1 año de edad que contraen la tos ferina terminan en el hospital, según los CDC.

Los sistemas inmunitarios de los recién nacidos son demasiado inmaduros para recibir la vacuna DTaP en ese momento, de modo que a los bebés no se les suministra la primera dosis hasta que tienen 2 meses de edad. Luego se administran más dosis a los 4, 6 y entre los 15 y 18 meses, y la última entre los 4 y los 6 años de edad.

Skoff dijo que el mejor modo de proteger a los bebés es que las madres reciban una vacuna de refuerzo de la tos ferina (conocida como Tdap) durante el tercer trimestre del embarazo.

De ese modo, explicó, los bebés nacen con algunos de los anticuerpos contra la infección del sistema inmunitario