El Progreso, Honduras.
Largas noches transcurren entre un teclado, una computadora y las manos de Tomás Chi, el progreseño de 36 años que se ha convertido con mucho esfuerzo en uno de los editores y directores de cine más tenaces del país.
Debutó con el largometraje Abusados, que realizó para Comvida El Progreso hace cinco años. Hasta la fecha ya es reconocido por varios proyectos; entre los que destacan 11 cipotes y Fuerzas de honor, cinta que está exhibiéndose en los cines hondureños y en la cual dirigió, editó, creó el sonido y maquilló actores.
Sin duda, es un hombre intrépido y apasionado. “Poder crear algo que no existe, darle vida a personas, emociones, momentos, luego plasmarlos en la pantalla grande y ver cómo el público disfruta, es una sensación que no creo poder encontrar en otro lado. Poder imaginar algo, escribirlo y darle vida es un privilegio que la vida me da”, expresa Tomás, quien también ha probado su faceta como guionista.
Asimismo, realiza documentales, cortometrajes, comerciales y videos musicales en los que deja fluir su más grande herramienta: la imaginación.
“Las veces que han surgido las historias las escribo tal cual llegaron a mi mente...por lo general trato de no forzarme para escribir o darle forma a algún proyecto, dejo que las cosas vengan a mí, y así es que he logrado hacer los proyectos”, cuenta. El progreseño asegura que su proyecto estrella siempre será el próximo a realizar, de esa manera no se vuelve conformista y sigue creciendo y cautivando al público con las ideas de sus ángulos y desarrollo de escenas. De esta manera logra su mayor satisfacción: el reconocimiento.
Fortaleza
De niño, Tomás Chi se entretenía jugando con figuras de personajes de acción: realizaba interminables peleas. Quién le diría que su pelea más grande sería superar la ausencia de su madre, Silvia Yanes, que como muchos hondureños tuvo que emigrar a Estados Unidos cuando él tenía 15 años. Desde entonces se volvió inseparable de su padre, el periodista y comentarista Tomás Chi Medina.
Con él descubrió su amor por las cámaras cuando lo llevaba al set de televisión donde laboraba. Ahora, Tomás tiene que dividir el tiempo para cuidar a su padre con ayuda de su esposa, ya que Chi Medina sufrió un derrame cerebral hace seis años; no obstante, esta situación no lo desilusiona y transmite un mensaje de fe.
“Luchen por sus sueños, por sus ilusiones, pero sin apartarse del camino correcto. Sí se puede salir adelante con mucho trabajo, dedicación, disciplina, mucha fe en Dios y confianza en lo que uno sabe hacer. Nunca hay que dejar de soñar, pero lo más importante es nunca dejar de trabajar por hacer realidad nuestros sueños. Dios es bueno”.
Largas noches transcurren entre un teclado, una computadora y las manos de Tomás Chi, el progreseño de 36 años que se ha convertido con mucho esfuerzo en uno de los editores y directores de cine más tenaces del país.
Debutó con el largometraje Abusados, que realizó para Comvida El Progreso hace cinco años. Hasta la fecha ya es reconocido por varios proyectos; entre los que destacan 11 cipotes y Fuerzas de honor, cinta que está exhibiéndose en los cines hondureños y en la cual dirigió, editó, creó el sonido y maquilló actores.
Sin duda, es un hombre intrépido y apasionado. “Poder crear algo que no existe, darle vida a personas, emociones, momentos, luego plasmarlos en la pantalla grande y ver cómo el público disfruta, es una sensación que no creo poder encontrar en otro lado. Poder imaginar algo, escribirlo y darle vida es un privilegio que la vida me da”, expresa Tomás, quien también ha probado su faceta como guionista.
 Tomás tuvo la oportunidad de ganar un taller de producción de cine por parte de Cinergia.
|
“Las veces que han surgido las historias las escribo tal cual llegaron a mi mente...por lo general trato de no forzarme para escribir o darle forma a algún proyecto, dejo que las cosas vengan a mí, y así es que he logrado hacer los proyectos”, cuenta. El progreseño asegura que su proyecto estrella siempre será el próximo a realizar, de esa manera no se vuelve conformista y sigue creciendo y cautivando al público con las ideas de sus ángulos y desarrollo de escenas. De esta manera logra su mayor satisfacción: el reconocimiento.
 En el taller de producción recibió enseñanzas de profesionales mexicanos como Martha Orozco y Carlos Taibo, este último ha sido mánager de producciones de la talla de Hombre en llamas y Elysium.
|
De niño, Tomás Chi se entretenía jugando con figuras de personajes de acción: realizaba interminables peleas. Quién le diría que su pelea más grande sería superar la ausencia de su madre, Silvia Yanes, que como muchos hondureños tuvo que emigrar a Estados Unidos cuando él tenía 15 años. Desde entonces se volvió inseparable de su padre, el periodista y comentarista Tomás Chi Medina.
Con él descubrió su amor por las cámaras cuando lo llevaba al set de televisión donde laboraba. Ahora, Tomás tiene que dividir el tiempo para cuidar a su padre con ayuda de su esposa, ya que Chi Medina sufrió un derrame cerebral hace seis años; no obstante, esta situación no lo desilusiona y transmite un mensaje de fe.
 Tomás está casado con Cindy Solís. Para él, desde que ella llegó a su vida hace casi nueve años muchas cosas cambiaron, todo gracias a los consejos, enseñanzas, motivación y amor que Cindy le da. También vive muy agradecido con su madre, ya que a pesar de la distancia ha sido un gran apoyo para él; y qué decir de su padre: su maestro. Ama los animales, por ello tiene dos mascotas: un felino llamado Gato (compañero de desvelos) y Bibi, su perrita.
|
 Tomás Chi también ha sido autodidacta.
|
¡Sacá lo bueno!
Es una campaña lanzada por LA PRENSA que celebra los detalles que nos alegran cada día y los hechos que nos enorgullecen, es una invitación a sacar lo mejor de nuestra gente que merece ser destacada: Gente luchadora, emprendedora, con grandes sueños e infinitas ganas de mejorar.
Saquemos lo bueno de nuestro país y hagámoslo noticia. Participa en nuestras redes sociales #SacaLoBueno o mándanos un correo a redaccion@laprensa.hn
 |
