Santiago de Chile, Chile.
La familia del comediante chileno Armando Navarrete, conocido por su personaje “Mandolino”, le pidió hoy al animador Mario Kreutzberger (Don Francisco) que se abstenga de ir a los funerales de su excolaborador y examigo.
El hijo del fallecido artista, Sebastián Navarrete, dijo a Radio Cooperativa: “No quiero que sus ojos (de Don Francisco) caigan sobre el cadáver de mi padre. No es sólo mi deseo, es el de toda mi familia”.
“Nunca ha habido una relación de los Navarrete con los Kreutzberger. El peor error que cometió mi padre es pensar que Mario era su amigo”, enfatizó La Prensa de Nueva York.
“Las reacciones que ellos (la familia Kreutzberger) tengan ahora me imagino que van a ser para apaciguar las aguas, intentar proteger a este caballero (Don Francisco), porque eso es lo que se hace en estos días. No me interesa lo que ellos tengan que decir”, señaló.
Pese a ello, en 1991 y tras 30 años de trabajo en conjunto, todo terminó. El comediante chileno se separó para siempre tanto del animador como del programa, volviéndose a ver sólo en contadas ocasiones como en la Teletón del 2008 o en el aniversario de los 50 años de “Sábados Gigantes”, donde Mandolino sólo participó del último de los cuatro episodios de celebración que se transmitieron el 2012.
Se dice que esa fue la última vez en que ambas personalidades del espectáculo chileno compartieron escenario, y que nunca lograron solucionar el conflicto que los separó el 91 publicó Diario El Dia.
Sin embargo, en ese entonces, Navarrete aseguró a El Mercurio que él y Mario Kreutzberger, “no perdemos la química, somos como hermanos”, dijo el comediante, haciendo hincapié en que “lo que siento por Mario Kreutzberger es amor”.
Familia molesta
“Nuestro deseo es que (Don Francisco) no venga al funeral, no queremos que ahora venga a llorar frente al cadáver de mi padre, porque cuando pudo haberle dado la mano no se la dio y le dio vuelta la espalda”, añadió.
“Yo no puedo estar velando a mi papá y este señor (Don Francisco) al lado. No soy así de hipócrita”, acotó.
Armando Navarrete saltó a la fama como comediante en el programa de televisión chileno Sábado Gigante, de Don Francisco, con el personaje “Mandolino”, una persona humilde que interactuaba con el animador del espacio por varios minutos.
La participación semanal del también cantante chileno se mantuvo en el espacio hasta 1991, cuando el programa ya era producido por Univisión y se grababa en Miami, y a partir de ahí ambos se alejaron por “razones profesionales”, según se explicó tiempo después.
El comediante, de 80 años de edad, falleció la víspera producto de un ataque cardiaco en Honduras, donde estaba radicado y realizaba el programa de televisión “La Hora de Mandolino” del Canal TEN.
Con la misma chispa de siempre, Mandolino abría el programa bailando e interpretando diversas frases que hacían reír a su público, pero también hacía entrevistas a diversas personalidades hondureñas y opinaba sobre el acontecer nacional.
Antes de ser el rostro del programa hondureño y tras dejar “Sábados Gigantes”, Navarrete comenzó a trabajar en el Canal Norteamérica, y luego se dedicó a otros oficios, llegando a ser repartidor de diarios, humorista en cruceros, etc.
Sin duda, Armando Navarrete es uno de los principales referentes del humor actual y, a pesar de morir en Honduras, es fuertemente recordado en Chile.
