La cosecha cafetalera 2023-2024 ha tenido un comportamiento variable, pero en los últimos meses se reportaron caídas en las exportaciones que oscilan entre 6% y 11%.
En el primer semestre de este ciclo que inició el 1 de octubre del año pasado, los envíos sumaron 2,525,584.2 sacos de 46 kilogramos, equivalentes al 38.5% de la meta exportable de 6.5 millones de sacos, según datos del Instituto Hondureño del Café (Ihcafé).
La generación de divisas también se ha venido reduciendo en comparación al año cafetero anterior y al 31 de marzo de 2024 alcanzaron 483.6 millones de dólares.
Al comparar estos datos de forma interanual, es decir, con el mismo período de la cosecha 2022-2023, existe una rebaja de 97,536.9 sacos e ingresos por 35.3 millones de dólares, ya que se vendieron 2,623.121.1 sacos que dejaron $518.9 millones. Con 6.90 millones de sacos de 46 kilogramos cerró la pasada cosecha y divisas por $1,390 millones.
“Esto es normal y todavía nos faltan abril, mayo, posiblemente junio, que son meses que las exportaciones siguen creciendo”, confirmó el presidente de la Asociación de Exportadores de Café de Honduras (Adecaféh), Miguel Pon.
El presidente del Ihcafé, Pedro Mendoza , declaró que “tenemos un pronóstico de 6.5 millones de sacos que se va evaluando trimestralmente; si hay problemas tanto en las exportaciones como en la generación de divisas”.
Para 2024 se proyecta una disminución alrededor de 165 millones de dólares en el valor exportado, como resultado de la reducción en el volumen de aproximadamente 500 mil sacos de 46 kilogramos en comparación a los niveles registrados en 2023, atribuido a la alta incidencia de la roya y la escasez de mano de obra, así como por la disminución del 5% en el precio internacional dado las expectativas de recuperación del parque cafetalero de Brasil, plantea el Banco Central de Honduras (BCH) en el último Programa Monetario bianual.
