Las pérdidas de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee) se mantienen en constante ascenso y a pesar de combatirlas desde tres frentes en 2023 no hubo resultados favorables.
De acuerdo con el último boletín estadístico del año pasado elaborado por la estatal, se especifica que los perjuicios alcanzaron 22,876.4 millones de lempiras de enero a diciembre, que equivalen al 37.77%.
El incremento interanual de las pérdidas del organismo responsable de la producción, transmisión, distribución y comercialización de energía eléctrica en el país fue de 1.79 puntos porcentuales cuando sumaron 35.98% en el duodécimo mes de 2022.
La información oficial es contraria a los datos del Programa Nacional para la Reducción de Pérdidas (PNRP) de la Enee que indica que los menoscabos cerraron en 36.78% al concluir el período de 12 meses anterior.
Pese a que este programada está dedicado exclusivamente a reducir pérdidas, los números evidencian que sus acciones no han sido suficientes. A 31.98% se debieron de disminuir los perjuicios con el plan de rescate de la estatal eléctrica -de conformidad con la meta planteada del 4%-, pero al final estos siguieron al alza.
Dentro de la referida institución también se conformó la Unidad Técnica de Control de Distribución (UTCD) una vez terminado el contrato de la Empresa Energía Honduras (EEH) con poca o nula contribución, según analistas consultados por este medio de comunicación.
Resultados
La generación neta en el sistema interconectado fue de 10,605.5 gigavatios en 2023. De 6,599.9 gigavatios fueron las ventas de energía de la Enee que dejó ingresos de 37,692.9 millones de lempiras.
En el caso de las pérdidas ascendieron a 4,005.6 gigavatios que representaron 22,876.38 millones de lempiras, es decir L2,087.69 millones más que en 2022. Esa energía se perdió por fallas en el sistema de transmisión y distribución.
El presidente del Sindicato de Trabajadores de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Stenee), Miguel Aguilar, manifestó que “consideramos que es una ligereza decir que se han reducido pérdidas cuando la facturación de la estatal sigue siendo la misma; las pérdidas han incrementado por muchos factores”.
Pese a las medidas adoptadas a partir del año pasado para mejorar los ingresos, las recaudaciones necesitan crecer más para cerrar la brecha con los gastos.
