Diversos sectores ligados a la distribución de combustibles en Honduras, piden al Poder Legislativo se apruebe de la Ley del Marco Regulatorio de la Comercialización de Hidrocarburos y Combustibles para ordenar el mercado de los derivados del petróleo en el país.
Ese interés se fundamenta en la necesidad de hacer más transparente este negocio, en especial lo relacionado con la calidad de los combustibles que se dispensan en las estaciones de servicio.
Los gasolineros aseguran que se habla de gasolina superior de 87 octanos y regular de 83 octanos, pero en la realidad los consumidores no saben si esos refinados cumplen con esa medida de capacidad antidetonante.
Ante esa situación, el gremio pide al Congreso que apruebe esa ley para controlar los productos petroleros que se consumen en el país.
Subrayan que el ordenamiento comprenderá la cadena de comercialización, o sea desde la importación hasta la venta al consumidor final.
En Honduras se consumen 19,986 barriles diarios de diésel, o sea 839,412 galones y es considerado el carburante de mayor demanda.
El consumo de gasolinas superior y regular, combinado es de 13,150 barriles, equivalente a 552,300 galones por día.
Calidad del combustible
La calidad del combustible es el aspecto que más atención despierta entre los gasolineros y transportistas de combustibles, pues se les suele señalar como los responsables de adulterar los derivados del petróleo.
Sin embargo, la Ley del Marco Regulatorio de la Comercialización de Hidrocarburos y Combustibles viene a regular las características físico-químicas que se establecen bajo ciertas condiciones para la aceptación del producto.
Juan Carlos Segovia, presidente de la Asociación Hondureña de Distribuidores de Productos del Petróleo (Ahidippe), sostiene que con la nueva ley se le garantiza al consumidor final la calidad del producto.
El entrevistado explica que la calidad de los carburantes se regula bajo un reglamento centroamericano, sin embargo, la calidad de las gasolinas no se verifica con la frecuencia suficiente.
Según Segovia, el marco legal vigente en la actualidad data de hace 15 años y ya no se corresponde con los estándares de calidad de los refinados que se venden en la actualidad.
“No podemos asegurar o garantizar que los combustibles que se importan estén dentro de los parámetros, no son de la mejor calidad, pero si se puede mejorar mucho”, comentó.
Fausto Erazo, director ejecutivo de la Asociación Hondureña de Empresarios de Productos Derivados del Petróleo (Ahdep) considera que es necesario que se apruebe la ley para garantizar el abastecimiento de combustibles de calidad.
Agregó que todos los sectores de la cadena respaldan esa iniciativa de ley, ya que cada uno de los actores está obligado a cumplir con las especificaciones técnicas.