Tegucigalpa, Honduras.
El cierre de la recaudación anual de impuestos en 2015 fue de L75,417 millones, lo que representó L10,718.2 millones más que lo registrado en el mismo lapso de 2014, confirman las autoridades de la Dirección Ejecutiva de Ingresos (DEI).
En términos porcentuales, la cifra récord registrada al 31 de diciembre significó un alza de 14.21% si se consideran los L64,698.8 millones contabilizados en diciembre de 2014, según el departamento de Estudio Fiscales, Recaudación y Cobranzas de la DEI.
El impuesto sobre venta (ISV) fue el de mayor aporte con L32,362 millones; impuesto sobre la renta (ISR), L24,773 millones; y el aporte vial, L10,316 millones.
Miriam Guzmán, titular de la DEI, refirió que la cifra lograda superó en L3,586 millones la meta fijada (L71,814 millones) para el año pasado.
No obstante, la meta aprobada en el Presupuesto General de la República para el ejercicio fiscal 2015 era de L66, 571, una diferencia de 8,846 millones en comparación a lo alcanzado.
La funcionaria atribuyó de nuevo los logros de la recaudación al aumento de la base de contribuyentes, las nuevas medidas de fiscalización y al cumplimiento voluntario del pago de los impuestos.
En detalle
El incremento en la recaudación se logra luego de la aplicación de algunas medidas fiscales del actual Gobierno. La más importante fue el Decreto 278-2013 nombrado como la Ley de Ordenamiento de las Finanzas Públicas, Control de las Exoneraciones y Medidas Antievasión.
Otra medida fue la adopción del régimen de facturación electrónica, que está vigente desde abril pasado.
Vía decreto se aumentó el ISV, que pasó de 12% a 15% en enero de 2014. Incrementó el gravamen a los derivados del petróleo (gasolinas, diésel y búnker).
También se estableció el cobro del 1.5% del ISR, que grava los ingresos netos de las empresas que reportan ventas superiores a L10 millones.
Hugo Noé Pino, economista del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi), reconoció la importancia de la reducción del déficit fiscal; sin embargo, cuestionó la forma cómo se alcanzó dicha reducción, ya que proviene del aumento de los impuestos indirectos que gravan el consumo.
El cierre de la recaudación anual de impuestos en 2015 fue de L75,417 millones, lo que representó L10,718.2 millones más que lo registrado en el mismo lapso de 2014, confirman las autoridades de la Dirección Ejecutiva de Ingresos (DEI).
En términos porcentuales, la cifra récord registrada al 31 de diciembre significó un alza de 14.21% si se consideran los L64,698.8 millones contabilizados en diciembre de 2014, según el departamento de Estudio Fiscales, Recaudación y Cobranzas de la DEI.
El impuesto sobre venta (ISV) fue el de mayor aporte con L32,362 millones; impuesto sobre la renta (ISR), L24,773 millones; y el aporte vial, L10,316 millones.
Miriam Guzmán, titular de la DEI, refirió que la cifra lograda superó en L3,586 millones la meta fijada (L71,814 millones) para el año pasado.
No obstante, la meta aprobada en el Presupuesto General de la República para el ejercicio fiscal 2015 era de L66, 571, una diferencia de 8,846 millones en comparación a lo alcanzado.
La funcionaria atribuyó de nuevo los logros de la recaudación al aumento de la base de contribuyentes, las nuevas medidas de fiscalización y al cumplimiento voluntario del pago de los impuestos.
En detalle
El incremento en la recaudación se logra luego de la aplicación de algunas medidas fiscales del actual Gobierno. La más importante fue el Decreto 278-2013 nombrado como la Ley de Ordenamiento de las Finanzas Públicas, Control de las Exoneraciones y Medidas Antievasión.
Otra medida fue la adopción del régimen de facturación electrónica, que está vigente desde abril pasado.
Vía decreto se aumentó el ISV, que pasó de 12% a 15% en enero de 2014. Incrementó el gravamen a los derivados del petróleo (gasolinas, diésel y búnker).
También se estableció el cobro del 1.5% del ISR, que grava los ingresos netos de las empresas que reportan ventas superiores a L10 millones.
Hugo Noé Pino, economista del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi), reconoció la importancia de la reducción del déficit fiscal; sin embargo, cuestionó la forma cómo se alcanzó dicha reducción, ya que proviene del aumento de los impuestos indirectos que gravan el consumo.