25/04/2024
07:54 PM

Vino de Jamaica con 'Esencia de la Frontera” nace en Lempira

Un emprendedor de 18 años que cursa el séptimo grado es el pionero de la empresa familiar Hay que luchar por los sueños, dice el joven originario de Lempira

    Gualcinse.

    Su amor por el campo, los cultivos, el vino y por cumplir sus sueños contagia. A sus 18 años, José Omar Díaz Castillo es un ejemplo de que cuando se quiere emprender se puede.

    Oriundo de la aldea de Tenango en Gualcinse, departamento de Lempira, a 18 kilómetros de la frontera con El Salvador, el joven rompió barreras y se convirtió en el embajador de su producto Esencia de la Frontera, un vino elaborado a base de flores de Jamaica que encierra esos sabores y olores de tierra adentro.

    Es un agricultor apasionado y actualmente cursa el séptimo grado en un programa de alfabetización.

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    Costo
    Cada botella de vino tiene un costo de 120 lempiras y se vende en algunos restaurantes y negocios del municipio de Candelaria en el departamento de Lempira. Omar busca más espacios para comercializar su producto.

    Es el tercero de cinco hermanos e hijo de María Carmen Carballo y José ángel Díaz. Recuerda que todo surgió por un cultivo de flor de Jamaica que comenzó a investigar. “Yo averiguaba sobre diferentes tipos de cultivo, granos básicos y otros que se dan en la zona y entonces tuve la oportunidad de sembrar nueve variedades de flor de Jamaica con semilla traída de Nicaragua por la Fundación para la Investigación Participativa con Agricultores de Honduras (Fipa) que es la organización que está en la zona”.

    Asegura que utiliza la fermentación natural y usa ingredientes como canela, clavos de olor, agua y levaduras.

    “Ahí nació mi emprendimiento, comenzamos a hacer los derivados de esta flor con la cual hicimos agua de flor de Jamaica que es la más común, mermelada, y a través de un facilitador de Fipa, que llegó en abril del 2017, nos dio la idea del vino y comenzamos a trabajarlo. Lo llevé a una feria agroempresarial y ahí me motivaron a mejorar”, indicó.

    Dijo que la parte más difícil es conseguir la materia prima, barreras de fermentación, botellas, etiquetas y lo aislado del lugar para vender su productos. “No hay muchas visitas de turistas por acá, pero seguiremos en la lucha”.

    Se presentó por primera vez en una feria agroempresarial en el instituto José María Medina de Candelaria, Lempira, y el profesor José Bonilla fue quien le sugirió el nombre Esencia de la Frontera.

    Es una empresa familiar que con su producto deleita los paladares de propios y extraños.

    Omar les dice a los jóvenes que planifiquen algo en la vida, que luchen por lo que quieren y que se alejen un poco de vicios que perjudica a la juventud y que sigan sus sueños.