Comer sin engordar en Navidad, ¡sí se puede!

No hay que esperar hasta enero para enfrentar la balanza y darse cuenta de que aumentaste 10 libras en un mes; sigue estos consejos para evitarlo

Las fechas navideñas presentan un gran número de acontecimientos marcados por la felicidad, los regalos, la compañía de la familia y, inevitablemente, abundante comida.

En una sola comida navideña se pueden consumir las mismas calorías que en varias comidas normales; es decir, ¡más de 2,500 calorías!

Lo más normal es que en estas fiestas la mayoría de las personas dejen a un lado la preocupación por la figura y se permitan el lujo de comer alimentos poco frecuentes en la dieta habitual. Y es que en esos días hacemos de la mesa la protagonista de los eventos y los excesos.

Son días mágicos, pero también implican grandes comidas en familia, celebraciones en el trabajo, picar pasteles a cualquier hora e infinidad de traguitos, todo en un ambiente que te invita a descansar y estar inactivo.

La Navidad no parece el mejor momento para hablar de dietas, pero te aconsejamos evitar los excesos que ocasionan ese aumento de peso en las fiestas.

Incluso se pueden hacer más agradables y empezar 2017 sin lamentarse por lo mucho que has comido, bebido y engordado.

Aquí te van diez recomendaciones que te ayudarán:

1. Planifica actividades que no involucren comidas como visitar los nacimientos en la ciudad.

2. El agua es tu mejor aliado, te ayudará a bajar de peso y lucir bien. La deshidratación aumenta la grasa del cuerpo. El aumento en la ingesta de agua te ayudará a eliminar más fácilmente el agua que tiendes a retener en tu cuerpo. No confundas la sed con el hambre.

3. No comer nada durante el día te provocará un hambre excesiva y arrasarás con toda la comida, mejor llega con un apetito moderado. Hay que apuntar la necesidad de hacer un almuerzo ligero si se sabe que por la noche se va a cometer algún exceso.

4. Antes de cocinar las comidas navideñas retira la grasa de los alimentos.

5. Bebe con moderación: en estas fechas es clásico abusar de las bebidas alcohólicas, que contienen abundantes calorías que se transforman en grasa corporal y “llantitas”. Durante esta época de celebraciones resulta difícil prescindir de los brindis. Aun así, limita el consumo de alcohol y, sobre todo, de vinos espumosos.

6. Baila lo más que puedas y bebe menos.

7. Bebe un vaso de jugo de algún cítrico (naranja, limón o toronja) antes de comer, ya que desintoxica el intestino y reduce el apetito.

8. Si después de la cena ya estás satisfecha y te falta el postre, no te sientas obligada a comerlo; podrás hacerlo otro día.

9. Trata de comer más fruta de la temporada navideña: manzana y uvas en vez de torrejas y pastel de fruta.

10. No prolongues tu apetito: evita llegar a la cena navideña con mucha hambre. Es mejor que hagas el desayuno y el almuerzo ligeros, aunque completos.

Foto: La Prensa

Norma Coello-Plum, máster en nutrición y seguridad alimentaria. Síguela en www.normacoello.com