REDACCIÓN. La familia muestra un núcleo que está en constante dinamismo. Es decir, las relaciones familiares evolucionan al igual que las personas cambian en el proceso de madurez. Para mejorar la familia, es muy importante que cada uno ponga de su parte de forma acorde a su edad.
A continuación, se le compartirán diez consejos que le pueden ayudar a fortalecer los lazos familiares, de una manera íntegra y basada en el amor, el respeto y los actos de servicio que demuestran el cariño hacia sus parientes, lo cual construye una relación sólida y a largo plazo.
1. En primer lugar, es muy importante tener una actitud de disponibilidad hacia los demás. Dedicar tiempo a cultivar las relaciones familiares es tomar conciencia de que el amor se demuestra a través del interés y la atención hacia los seres queridos más cercanos. Cuando no se dedica el tiempo necesario a las relaciones, entonces, se produce la indiferencia y el distanciamiento.
2. La creatividad es un valor muy importante en las relaciones personales para romper la rutina y aportar calidad a los planes de ocio.
En ese caso, toma la iniciativa para proponer nuevas actividades a tus seres queridos con el objetivo de compartir un plan distendido con los demás que refuerce la memoria emocional y los recuerdos agradables.
3. El sentido del humor propio de aquellas personas que saben reírse de sí mismas también muestra una actitud de inteligencia emocional muy valiosa en aquellos que relativizan las dificultades.
4. Es indispensable tener un nivel de expectativas realistas. Un aprendizaje valioso es valorar las virtudes de los demás y poner más atención en este aspecto que en los defectos.
5. Potencia aquellos planes que puedan estimular la conversación. Por ejemplo, organizar una cena familiar puede ser una buena idea. Programar una excursión familiar también puede ser efectivo para caminar y charlar.
6. Piensa en aquello que puedes aportar a los demás, es decir, en cómo puedes sumar a los vínculos afectivos tu verdadera esencia. Se trata de ser tú misma.
7. Cuida los buenos modales a través de la amabilidad en el trato que refuerza la empatía y la asertividad. Existen palabras que mejoran el diálogo familiar: gracias y por favor.
8. Cultiva la relación que mantienes contigo misma para poder mejorar también, el vínculo con los demás. La autoestima es un pilar clave en el éxito de las relaciones sociales. Por tanto, es positivo también disfrutar de espacios de soledad y dedicarte un tiempo que sea solo para ti.
9. Establecer rutinas y hábitos familiares también puede ser una buena pauta para mejorar la comunicación. Por ejemplo, existen familias que tienen la costumbre de comer en familia cada domingo.
10. Muestra una coherencia entre hechos y palabras para que los mensajes de afecto lleguen de verdad del modo efectivo al interlocutor. Por ejemplo, cuando una persona rompe con frecuencia sus promesas, entonces, transmite un mensaje incoherente desde el punto de vista de la palabra y de la acción.
