San Pedro Sula. Nelson Chinchilla es un destacado neurocirujano que destaca por su vena de artista, especialmente en la ejecución de instrumentos como la guitarra. Ahora asume un nuevo reto al tomar la dirección de la Junta Directiva de la Fundación Filarmónica de San Pedro Sula.
Esta fundación es la “sombrilla” que ampara a la orquesta de cámara de San Pedro Sula y a la Escuela de Música Victoriano López (EMVL). El doctor Chinchilla, productor del espectáculo Escalas y movimientos, conversa con LA PRENSA sobre la EMVL y la fundación.
- En su agenda ahora tiene la responsabilidad de presidir la Fundación Filarmónica, ¿cómo lo asume?
Con mucha energía, esperanza y deseo de trabajar en equipo. Hemos reunido grandes valores de la ciudad para este proyecto: músicos, productores musicales y empresarios. Dos brazos que enfrentarán este reto académico musical y administrativo.
- ¿Por qué es importante la Fundación Filarmónica para la Victoriano y la orquesta de cámara?
La fundación es el cerebro para que funcionen todas las partes. Ha estado haciendo lo debido, venimos a fortalecer y continuar la labor que hasta ahora se ha hecho. No esperamos un antes y un después, sino que cada quien aporte lo que le corresponde.
- ¿Cuál es la principal tarea que debe atender la junta?
Buscar un modelo que se acerque a lo autosostenible, porque la dependencia de patrocinios y donaciones es incierto, no da estabilidad. La riqueza musical de la Victoriano López es el tesoro para generar fondos. Este modelo de autosostenibilidad se puede implementar dando conciertos frecuentes y estableciendo convenios con la empresa privada y otros organismos. Hay muchos congresos médicos o encuentros de empresarios en San Pedro Sula y se puede buscar una forma de contratación.
Generar entradas a través de la actividad musical, con empresarios y conexiones internacionales. De la misma escuela podrían salir células de músicos y aprovechar por ejemplo los cruceros que atracan en Roatán para vender un espectáculo. Queremos buscar todas las formas posibles para ayudar a la escuela, no deseamos seguir en dependencia.
- Percibo mucha ilusión, ¿cree que la empresa privada logre entender que la cultura puede ligarse al turismo y generar desarrollo?
En esta Junta Directiva tenemos músicos y un aparato administrativo de visión.
- Hay incertidumbre por la disposición de la Secretaría de Educación de que centros como la Victoriano López impartan también clases de humanidades. ¿Cómo asume este reto la nueva Junta Directiva?
El título de la Victoriano no tiene traducción de validez en los sistemas educativos. Los jóvenes egresan con formación pero su título no es reconocido en las instancias educativas. ¿Queremos seguir en las catacumbas académicas o que el estudiante tenga acreditación académica para acceder a las universidades? Si el título de bachiller musical de la Victoriano ha de sufrir transformación será para mejor, siempre conservando el núcleo irreductible de la educación musical; que no admite devaluación, pero sí enriquecimiento.
- ¿Qué opina de que gran porcentaje de los alumnos vienen de escuelas bilingües y hay temor de que se reduzca la matrícula en la Victoriano al ampliar la malla curricular con esta disposición?
Los jóvenes de las bilingües -en gran parte- no se concentran en la música sino en otras carreras; así no vamos a lograr la pureza de músicos que buscamos. Un chico que accede a la educación musical a partir del nivel medio versus uno que desde los cinco años se viene formando en la música y sigue en ese ambiente, indiscutiblemente el producto es diferente. No estamos inventando nada, es lo que se hace en otros países. No queremos que a los chicos que desde temprano han estudiado música se les cargue con llevar un bachillerato y su educación musical por aparte. Este tema se debe socializar por si hay manipulación, si es parcialmente entendido y para apagar el pensamiento catastrófico que se denomina apaga-fuego -alguien dice una idea y la apaga-; las grandes historias de la humanidad son sueños con alas.
- ¿La apuesta es atender alumnos que seguirán la carrera musical?
Queremos partir de la Escuela Primaria de Aplicación Musical, la cual se formó con la idea de que fuera el semillero para la Victoriano López. Había un acuerdo pero se cortó hace muchos años. El interés es retomar la relación, potenciar a los alumnos de ese centro y que luego ingresen a la Victoriano. Que se preparen desde los siete años para que lleguen a la Victoriano y después ingresen a la Escuela Superior de Música para obtener su licenciatura.
- ¿Se incrementará el costo de estudiar en la Victoriano?
La idea es mantener el mismo costo dándole al estudiante un bachillerato en ciencias y letras con orientación musical, sin que los padres incurran en gastos de tener a sus hijos en dos instituciones educativas.
