En esta época del año uno de los mayores enemigos de la velocidad de las conexiones wi-fi es difícil de evitar pues se encuentra en prácticamente todas las casas: las luces de navideñas.
De acuerdo con Ofcom, entidad que regula las telecomunicaciones en el Reino Unido, las luces que nos inundan por todos lados son responsables por un 20% del mal desempeño de las conexiones inalámbricas.
Aunque son una causa común por estos días, no están ni cerca de ser las únicas, ya que los monitores para bebé, celulares y otros dispositivos, pueden igualmente provocar indeseables interferencias.
Afortunadamente, hay formas de contrarrestar este problema, y no solo en Navidad, sino a lo largo de todo el año.
Reiniciar el router
Hacer esto permite que busque un nuevo canal a través del cual conectarse en caso de que el habitual esté siendo utilizado por otro dispositivo.
Aléjalo de otros dispositivos
Luces halógenas, reguladores de intensidad de luz, altavoces y las ya mencionadas luces navideñas, entre otros, pueden interferir con la señal por lo que resulta recomendable alejar el router de esos dispositivos.
En el centro
Los muebles, las paredes, y hasta los cables de energía detrás de las paredes y debajo del piso también causan interferencia. Una buena opción ubicar el router en una mesa en el centro de la casa, pero como ya dijomos, alejada de otros dispositivos, a fin de distribuir la señal de manera más uniforme y minimizas esas molestas interferencias.