Redacción
Varios medios especializados reportan que por primera vez Apple ha comenzado a fabricar sus propias pantallas para teléfonos.
Junto con esto, la compañía de la manzana desarrolla la novedosa tecnología MicroLED, la cual haría su debut en los próximos modelos que lance la empresa al mercado.
Se calcula que unos 300 ingenieros desarrollan la tecnología en centro de fabricación secreto, ubicado cerca de su futurista sede en Santa Clara, California.
La producción actual es relativamente pequeña, pues los prototipos se encuentran en su etapa de pruebas y sus primeras aplicaciones serían en computadoras portátiles y relojes inteligentes.
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Las ventajas que ofrece la tecnología MicroLED es que sus propiedades permiten crear dispositivos más delgados, con mayor nitidez y definición de color y un considerable consumo bajo de energía.
Con esta jugada la estrategia de Apple parece encaminada a depender menos de proveedores externos para fabricar sus productos, cuyos componentes son a menudo fabricados por sus rivales de mercado, principalmente LG y Samsung
