Como todos los hondureños, también yo espero con ansia e ilusión la semana que viene. Y no solo por el feriado y su consecuente descanso, sino porque en esta Semana Santa voy a ver de nuevo el
Nuestro país es profundamente vulnerable en muchos sentidos.Ha sido evidente, por ejemplo, que si la providencia divina no hubiese atendido las oraciones de personas piadosas el huracán Julia habría