San Pedro Sula, Honduras
Comenzó abusando sexualmente a su hija mayor y luego siguió con la otra cuando esta apenas tenía seis años, por ello, José Manuel Alvarado Orellana fue condenado ayer a 45 años de prisión.
El padre, quien sería sometido a un juicio oral y público, antes de ingresar a la sala de audiencias del Tribunal de Sentencia aceptó los hechos imputados por la Fiscalía Especial de Protección a la Niñez.
José Manuel Alvarado Orellana fue condenado por tres delitos de violación especial en concurso real en perjuicio de sus dos hijas, de quienes abusó sexualmente.
La Fiscalía Especial de la Niñez cuenta con pruebas en contra del condenado del abuso sexual que cometía con su hija mayor desde que esta tenía seis años. Cuando ella tenía 9 años, el padre fue descubierto, pues también abusó de su hija menor, quien en ese momento había cumplido seis años.
Según la Fiscalía, los hechos ocurrieron en la casa en la que vivían las menores con sus padres, en el barrio Las Américas, de San Antonio de Cortés. Los abusos ocurrieron en momentos y fechas diferentes y la Fiscalía solo tenía pruebas de que había ocurrido en tres ocasiones, en base a las declaraciones de las víctimas. Antes de ingresar a la sala 2 en el Tribunal de Sentencia, José Manuel Alvarado Orellana dijo a la defensora pública que aceptaría la medida de estricta conformidad, por lo que le explicaron que sería condenado a 45 años de cárcel. El hombre, que solo era acompañado por el policía penitenciario, se agarró la cabeza con sus manos y respiró profundo. Luego, comentó que estaría mejor preso, pues recibía los tres tiempos de comida.
El Tribunal de Sentencia envió al condenado al centro penal, de donde puede ser trasladado a la cárcel El Pozo, en Ilama, Santa Bárbara, si así lo deciden las autoridades penitenciarias.
