Mientras continuaban los trabajos para terminar de excavar la fosa donde serán enterradas las víctimas de la masacre del sábado en Tegucigalpa, sujetos desconocidos realizaron varios disparos sembrando el pánico entre las personas que se encontraban en el lugar.
La rápida reacción de los efectivos de la Policía Militar que resguardaban el etierro evitó que hubiera víctimas mortales ya que los individuos huyeron hacia un cerro aledaño.
Las personas asustadas se resguadaron tras las máquinas que excaban la fosa y en árboles cercanos.
Según testigos, los responsales pueden ser pandilleros que se movilizaron en grupo hacia el cementerio ubicado en Yaguacire, capital de Honduras.
Las autoridades continúan la búsqueda con binoculares y realizan la inspección del lugar.
Los vecinos del sector 8 de la colonia Villa Nueva piden a las autoridades que les brinde seguridad ya que temen por sus vidas.
Luego del incidente se realizó el sepelio de los cuatro féretros en la fosa común.
La Policía señala que una pelea de territorio entre pandillas sería la principal causa del crimen que dejó a 7 personas muertas el sábado en Tegucigalpa.
 Familiares y amigos despidieron a sus seres queridos.
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 Varias personas se desmayaron durante el entierro que duró cerca de seis horas.
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| El dolor y el sufrimiento de los familiares se extendió durante toda la tarde.
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