Tegucigalpa, Honduras
Eligio Durón Aceituno (54), un motorista del transporte urbano, fue asesinado a balazos por dos sicarios en la terminal de buses de Valle de Ángeles, a inmediaciones del hospital San Felipe, de la capital.
El infortunado falleció en el interior de un autobús rapidito blanco, con matrícula AAI-0769, que cubre la ruta de Valle de Ángeles a Tegucigalpa.
La versión preliminar que conoció la Policía es que el ahora occiso trataba de limpiar el interior de la unidad de transporte, cuando de pronto en la calle se estacionó un turismo gris, del cual se bajaron los malhechores, quienes sin discutir lo mataron.
Algunos de los trabajadores del transporte presumen que el crimen está relacionado con la extorsión, porque los dueños de buses no han pagado el “impuesto de guerra”.
Un doliente lamentó la falta de presencia policial y criticó que agentes de la Dirección Nacional de Tránsito a lo único que llegan es a hacer esquelas y pedir los 50 lempiras que cobran por cada autobús.
