La periodista hondureña Fidelina Sandoval denunció hoy haber sido víctima de un atentado con arma de fuego, del cual salió ilesa, cuando entraba al canal 'Globo TV' en Tegucigalpa, donde trabaja.
'Cuando iba llegando a mi trabajo, observe cerca del canal (Globo TV) a dos hombres sospechosos que se transportaban en un vehículo y luego escuche un fuerte ruido, era un disparo', explicó Sandoval en rueda de prensa en el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (Cofadeh).
El ataque ocurrió a las 8:30 am hora local, indicó la comunicadora, quien aseguró que no resultó herida.
'Estoy bien gracias a Dios, la celebración es doble, primero porque estoy viva y segundo porque puedo celebrar con mi familia', subrayó Sandoval, quien hoy cumple años, aunque no precisó cuántos.
La coordinadora del Cofadeh, Bertha Oliva, dijo en la rueda de prensa que en las próximas horas acompañará a Sandoval a interponer la denuncia ante las autoridades de seguridad.
'Interpondremos la denuncia y alertaremos de manera urgente a las redes internacionales de protección de derechos humanos', indicó Oliva, quien condenó el ataque.
Entre 2003 y 2012 han sido asesinados 31 periodistas en Honduras sin que ningún caso haya sido esclarecido, según el estatal Comisionado de Derechos Humanos.
Globo TV es un canal que suele denunciar irregularidades y actos de corrupción de funcionarios del gobierno del presidente Porfirio Lobo, cuyas relaciones con sectores de la prensa han sido conflictivas en los últimos meses.
Un total de 139 periodistas de 29 países perdieron la vida mientras ejercían su profesión en el 2012, lo que representó un incremento del 30 % con respecto al año 2011, según denunció hoy la Campaña Emblema de Prensa (PEC).
La investigación de la PEC expresa que a lo largo de los últimos cinco años, desde el 1 de enero de 2008 hasta la fecha, el número de periodistas asesinados llegó a 569, lo que representa una media de 114 al año.
En esos cinco años, los diez países donde más periodistas han muerto han sido Filipinas, México, Pakistán, Irak, Siria, Somalia, Honduras, Brasil, Rusia e India, que han acumulado dos tercios del total de las víctimas.
