25/04/2024
07:16 PM

Cinco personas pierden la vida en balacera en Tegucigalpa

Varios hombres armados con fusiles interceptaron un vehículo en que viajaba un empresario.

En zona de guerra se convirtió una calle que une a las colonias La Haya y El Pedregalito de Comayagüela, donde un sangriento tiroteo dejó cinco muertos.

Una pelea entre bandas criminales es la hipótesis más fuerte que maneja la Policía en torno a esta nueva masacre.

El hecho se produjo a las 10:00 am de este lunes, cuando falsos policías que se conducían en una Nissan Pathfinder, interceptaron a los ocupantes de un pick up Mitsubishi Sportero, gris, con placas PCU-6856, del cual se bajaron cinco hombres armados con fusiles, chalecos antibalas y gorros pasamontañas, quienes comenzaron a disparar, lo que desencadenó un cruce de fuego.

En el tiroteo fallecieron tres hombres, entre ellos uno de los falsos policías, un empresario de transporte de carga y un guardaespaldas; una estudiante de secundaria y una humilde vendedora de frutas que transitaba por el lugar. En la escena del crimen quedaron más de 100 casquillos de fusil, de pistolas nueve milímetros y calibre 40, informó una fuente policial.

Las víctimas fueron identificados como Rubén Asdrúval Barahona Valladares (38), con domicilio en la residencial Las Uvas, era propietario de un lote de 20 camiones de carga en los que se dedicaba a la distribución de producto de una empresa panificadora, era quien conducía el pick up gris.

El cuerpo quedó tendido en la calle de tierra con varias heridas de bala y a su lado una pistola.

La menor fallecida es Bessy Lorena Canales Martell (17); estudiante de Bachillerato en Ciencias y Letras en el Instituto Joshua. Según relatos, un amigo le pidió el favor a Barahona Valladares de ir a recoger a la joven estudiante al colegio que está cerca de El Pedregalito.

La infortunada quedó acribillada a tiros en el asiento trasero del Mitsubishi Sportero.

También la Policía identificó a German Geovany Amador Guifarro, el supuesto miembro de la banda de hombres armados protagonista de la balacera.

El ahora occiso tenía el rostro cubierto con un gorro pasamontañas, así como un chaleco antibalas con el logo de Policía de Tránsito. El cadáver quedó tirado en el lado derecho del pick up gris con varias heridas de bala.

La versión que conoció la Policía es que sus compinches recogieron el arma de fuego que portaba y se la llevaron.

Johny Jeremías Salgado (34), era el supuesto guardaespaldas de Barahona Valladares. Según lo investigado por la Policía, era un exagente del Comando Cobras que había sido separado.

La quinta fallecida es María Magdalena Durón Ramírez (31), una humilde vendedora de frutas, con dos meses y medio de embarazo, según dijo un doliente. Deja tres hijos en la orfandad y residía en la colonia Santa Cecilia, sector de El Carrizal.

Ella transitaba por el lugar junto a su compañero de hogar Josué Ángel Zúñiga y una niña de 10 años, cuando se registró el intercambio de disparos.

Padre e hija lograron sobrevivir de milagro y salieron ilesos.

Sin poder contener el llanto, Zúniga relató que su compañera de hogar tenía muchos años de dedicarse a vender en el sector. Aseguró que unos cinco encapuchados se bajaron de la camioneta negra y comenzaron a disparar.

Persecución policial

Tras recoger el arma de fuego que portaba su compinche fallecido, unos cuatro falsos policías huyeron en la camioneta, mientras que la Policía inició una intensa búsqueda en la zona. Minutos más tarde el automotor fue localizado por dos policías en motocicleta de la Dirección Nacional de Tránsito en el anillo periférico, tras colisionar con otro carro, por lo que iniciaron una tenaz persecución.

Los malhechores se desviaron por la calle de la Israel Norte en dirección a la colonia 21 de Febrero. A inmediaciones de la colonia La Soledad, la camioneta cayó en una cuneta, por lo que se bajaron y escaparon. Julián Hernández, portavoz de la Secretaría de Seguridad, confirmó que en el interior del vehículo se encontraron cuatro fusiles R.15, tres chalecos antibalas y dos pistolas 9 milímetros, entre otras evidencias.

Dijo que, según las investigaciones, el auto está relacionado con el asesinato de las cinco personas entre La Haya y El Pedregalito.

Informó que, aparentemente, los individuos que se conducían en la camioneta negra le dieron seguimiento al Mitsubishi Sportero, luego se produjo el tiroteo.

“Las informaciones que nosotros tenemos, la Policía Nacional, hasta este momento, estamos hablando de que podría estarse tratando de peleas entre bandas”, expresó.

El vocero policial reiteró que, de “acuerdo a las informaciones que tenemos, podría tratarse de pelea entre bandas; en este momento se está investigando cual podría ser, específicamente, el móvil”.