Tegucigalpa. Con saña asesinaron a balazos a un exmilitar el sábado en horas de la mañana en el municipio de San Ignacio, Francisco Morazán, donde dos malhechores le dispararon con fusiles AK-47.
El cadáver de Evaristo Morazán Estrada, originario de El Naranjal, en la misma comprensión municipal, quedó desfigurado porque -según el relato de un doliente- recibió unos 120 disparos.
Los homicidas fueron dos hombres que se conducían en un carro, quienes dispararon a mansalva contra el infortunado cuando se dirigía a trabajar a un cultivo de tomates. Un testigo aseguró que dos hombres que se conducían en un carro blanco armados con fusiles AK-47 interceptaron a Morazán Estrada a las 5:00 am en el barrio Las Delicias y abrieron fuego contra él hasta terminar los tiros.
Los criminales cargaron de nuevo sus armas y las volvieron a descargar en el cuerpo inerte del infortunado, que yacía tirado en el suelo, según relató un doliente que retiró los restos mortales en la morgue de Medicina Forense.
Aseguró que hasta el machete que llevaba la víctima quedó en pedazos a causa de los múltiples disparos y que en la escena del crimen quedaron 120 casquillos, los que fueron levantados por la Policía.
Dolientes dijeron desconocer las causas por las cuales lo mataron con tanta saña; aunque presumen que tenía enemigos, porque él anduvo por muchos lugares del país.
