Intibucá, Honduras
Una joven de 18 años de edad de la comunidad La Fila, Mazaguara, Intibucá, en el occidente de Honduras fue ultimada por su propio padre la noche del sábado.
La víctima identificada como Sandra Patricia Domínguez Hernández (18), era madre de un niño que sería producto de una relación marital con su propio padre que obedece al nombre Orlando Domínguez, quien además la mantenía amenazada, según la versión de familiares.
Los parientes de la jovencita que retiraron su cadáver en la morgue de Medicina Forense de Tegucigalpa, dijeron que en un ataque de celos el hombre mató a su hija a machetazos. Los dolientes afirmaron que un joven de la comunidad estaba pretendiendo sentimentalmente a la joven, lo que provocó los celos de su padre, que le reclamó fuertemente, pero cuando ella se alejó de él, Orlando, con machete en mano la siguió hasta la casa de otro pariente, donde la atacó.
La familia de Sandra dijeron que escucharon los gritos y salieron a buscarla, pero cuando llegaron ya estaba muerta.
Orlando Domínguez huyó del lugar para no ser detenido por los vecinos de la comunidad o por la autoridad policial.
Mientras que uno de los parientes de la víctima aseguró que ella tenía un hijo del cual no se sabe quién es el progenitor, ya que nunca se le conoció novio porque el padre no se lo permitía y afirmó que se presume que el niño es producto de una relación marital entre la muchacha y su padre.
El doliente también dijo que Orlando mantenía amenazada a toda la familia y por eso nadie se atrevía a denunciarlo, ni su propia esposa que era víctima de constantes maltratos.
El cadáver de la joven fue retirado de la morgue de Tegucigalpa y trasladado a Intibucá para darle sepultura.
Los parientes pidieron que se haga justicia en el crimen de la joven madre.
