Tegucigalpa, Honduras.
Solo ayer, la Policía Nacional capturó a cuatro sospechosos de delitos sexuales. En lo que va del año han detenido a más de 960 sospechosos de violación, violación especial y actos de lujuria.
Las capturas se ejecutan a nivel nacional, adonde los hechores han sido menores de edad, ancianos, maestros y todo tipo de personas que se aprovechan de la inocencia o vulnerabilidad de las víctimas para cometer los abusos sexuales.
Los funcionarios de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), Dirección Nacional de Prevención y Seguridad Comunitaria (DNPSC), asignados a las Jefaturas Departamentales de Comayagua, Intibucá y Cortés capturaron a cuatro hombres por ser sospechoso de diferentes delitos sexuales.
Agentes de investigación de Comayagua capturaron en el municipio Ojos de Agua a Antonio Valenzuela Ortega (de 42 años), a quien lo suponen responsable de violación especial en perjuicio de una menor de edad, según orden de captura emitida en fecha 26 de noviembre de 2015 por el Juzgado de Letras de ese sector.
Agentes de Intibucá arrestaron en la aldea El Picacho, del municipio de Yamaranguila, a los hermanos Florencio López Sánchez (de 24) y Juan Isidro López Sánchez (de 23), a quienes se les ejecutó ordenes de captura emitidas en fecha 8 de febrero del presente año por el Juzgado de Letras de Intibucá por suponerlos responsables de actos de lujuria, lesiones graves y amenazas en perjuicio de tres mujeres.
Agentes asignados a Cortés detuvieron en la aldea Muchilena, municipio de Omoa, a Marco Antonio Rodríguez Arita (de 33), a quien suponen responsable de actos de lujuria en perjuicio de una menor de edad, según orden de captura emitida por el Juzgado de Letras de Puerto Cortés en fecha 6 de febrero de 2018.
Del total de detenidos hasta la fecha, 757 han sido en atención a órdenes de captura giradas por los diferentes juzgados de la república.
La DPI pondrá a todos los imputados antes descritos a disposición de las autoridades correspondientes para que respondan por el delito de que se les acusa.
Según las autoridades policiales, lo más grave es que los agresores son personas cercanos a las víctimas, muchas veces los detenidos son parientes que viven en las misma casa, maestros o vecinos.
Solo ayer, la Policía Nacional capturó a cuatro sospechosos de delitos sexuales. En lo que va del año han detenido a más de 960 sospechosos de violación, violación especial y actos de lujuria.
Las capturas se ejecutan a nivel nacional, adonde los hechores han sido menores de edad, ancianos, maestros y todo tipo de personas que se aprovechan de la inocencia o vulnerabilidad de las víctimas para cometer los abusos sexuales.
Los funcionarios de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), Dirección Nacional de Prevención y Seguridad Comunitaria (DNPSC), asignados a las Jefaturas Departamentales de Comayagua, Intibucá y Cortés capturaron a cuatro hombres por ser sospechoso de diferentes delitos sexuales.
| Marco Antonio Rodríguez es acusado de actos de lujuria y lesiones graves.
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Agentes de Intibucá arrestaron en la aldea El Picacho, del municipio de Yamaranguila, a los hermanos Florencio López Sánchez (de 24) y Juan Isidro López Sánchez (de 23), a quienes se les ejecutó ordenes de captura emitidas en fecha 8 de febrero del presente año por el Juzgado de Letras de Intibucá por suponerlos responsables de actos de lujuria, lesiones graves y amenazas en perjuicio de tres mujeres.
Agentes asignados a Cortés detuvieron en la aldea Muchilena, municipio de Omoa, a Marco Antonio Rodríguez Arita (de 33), a quien suponen responsable de actos de lujuria en perjuicio de una menor de edad, según orden de captura emitida por el Juzgado de Letras de Puerto Cortés en fecha 6 de febrero de 2018.
| Antonio Valenzuela Ortega es acusado de violación especial en perjuicio de una menor de edad.
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La DPI pondrá a todos los imputados antes descritos a disposición de las autoridades correspondientes para que respondan por el delito de que se les acusa.
Según las autoridades policiales, lo más grave es que los agresores son personas cercanos a las víctimas, muchas veces los detenidos son parientes que viven en las misma casa, maestros o vecinos.
